Fundadora de las religiosas franciscanas, llamadas Clarisas. Su padre pertenecía a una de las familias de mejor linaje de la ciudad, y su madre era una dama de profundo sentido cristiano. Cuando tenía 18 años, subyugada por el ardor evangélico de su compatriota Francisco, que acababa de poner en marcha la nueva fraternidad, se confió a su dirección.
Santa Clara de Asís
Abandonó su casa y en la capilla de la Porciúncula, donde vivía San Francisco, tomó el hábito de manos del santo, prometiéndole obediencia. Inmediatamente fue confiada por Francisco al monasterio benedictino de San Pablo de las Abadesas. Allí tuvo que vencer la enconada oposición de sus parientes. Quince días después, Francisco le procuró un asilo más seguro en el convento de Sant´Angelo in Panzo, en las estribaciones del monte Subasio, donde fue a unírsele, fugada asimismo clandestinamente, su hermana Inés
Posteriormente, Francisco dispuso para Clara y sus imitadoras una vivienda, adaptada al ideal de pobreza y sencillez que ella misma anhelaba, junto a la pequeña iglesia de San Damián, por él restaurada. Y en ella se instaló el pequeño grupo de Damas Pobres, llamadas luego Clarisas, integrado ya con otras tres compañeras. La comunidad femenina imitaba en lo posible la de los hermanos franciscanos.
Durante cuarenta años, Clara fue la superiora del convento de monjas de San Damián. Su vida era de gran austeridad y muy rica en obras de caridad y piedad. Se cuenta que alejó con sus oraciones a los sarracenos que asediaban Asís. Redactó una Forma de vida en la que insistía en la pobreza como base para la regla que ella misma redactó con posterioridad (1247-1252), adaptación para las religiosas de la regla franciscana. En 1253, una bula pontificia aprobaba solemnemente la regla que había compuesto. Murió en 1253 y fue canonizada en 1255. Sus restos descansan en la cripta de la iglesia a ella dedicada en Asís. Su fiesta se celebra el 12 de agosto.
(Olot, 1878 - Barcelona, 1958) Escultor español. A los 13 años ingresó en la academia de arte de su localidad natal, que estaba regida por D. José Berga Boix, y donde recibió enseñanzas de dibujo y pintura orientadas hacia el paisaje. En 1897, marchó a Toulouse, donde ingresó en la Escuela de Bellas Artes. Obtuvo premios de escultura en los años 1897, 1898 y 1899.
En 1900, consiguió otro galardón, el Petit Prix del municipio de Toulouse, por un bajorrelieve de Cincinato, pero fracasó al intentar conseguir una pensión en París. Hizo el viaje por su propia cuenta y comenzó a ganarse la vida con encargos de pintura y escultura. En París fue presentado a Rodín y trabajó en el taller de Barrias. En 1906, realizó la estatuaria del Casino de Montecarlo, y, a partir de esa fecha, se sucedieron sus triunfos y los encargos importantes, a los que daba forma en su taller de la avenida Malakoff.
En 1910, La diosa, su obra más bella, plena y característica, obtuvo la primera medalla en la Exposición Nacional de Madrid. De 1911 a 1912, cosechó grandes éxitos en París, Roma y Amsterdam. En 1913, realizó en Barcelona una exhibición de sus extraordinarios dibujos de Isadora Duncan. En 1920 concurrió a la Nacional de Bellas Artes con su solemne obra Serenidad. En 1930, viajó a Grecia y, dos años más tarde, se trasladó definitivamente a Barcelona.
Cultivó con especial predilección la representación del desnudo femenino, del que dejó bellos ejemplares interpretados con un sentido de inspiración neoclásica, y también la imaginería religiosa. Su producción incluye desnudos masculinos, el San Benito sedente del monasterio de Montserrat y los bustos de Lulio, Exímeno y Luis Vives encargados por el Instituto d´Estudis Catalans; el de Eugenio d´Ors; y el tema de La voluntad, prenda de ingreso en la Academia de San Fernando. En 1969 se inauguró en Barcelona el Museo Clará