Escritora estadounidense. A los diecinueve años se casó con Reeves McCullers, con quien mantuvo una relación compleja y llena de contradicciones, en la que se sucedieron las rupturas y las reconciliaciones, alternativamente. En la problemática vida de esta autora la enfermedad física y psicológica fue, asimismo, una presencia constante. Su narrativa está poblada de amor y de dolor prácticamente a partes iguales. El paisaje de su infancia en el Sur con sus veranos tórridos, sus cafés, sus barrios miserables y los solitarios personajes embrutecidos por la frustrante vida provinciana es recurrente y protagónico.
En su primera novela, El corazón es un cazador solitario (The Heart is a Lonely Hunter, 1940), gracias a la cual se ganó el apelativo de "niña prodigio de la literatura americana", McCullers explora el drama de la incomunicabilidad: la soledad del sordomudo Singer, figura de rara intensidad simbólica por ser representativa de la imposibilidad misma de comunicar, es un reflejo de la de los personajes que la eligen como destinatario de sus distintos desahogos verbales. Para dar forma a esta maraña de atracciones insondables, McCullers se sirve de lo grotesco, que en su primera obra narrativa no refleja solamente una realidad grotesca -la del Sur- sino que es el signo de un malestar existencial profundo.
En 1941 apareció Reflejos en un ojo dorado, estudio sobre la homosexualidad y sobre los tortuosos caminos de un eros desviado que le fue reprochado de forma general por la crítica de la época debido a su sensacionalismo "gótico" y la implícita celebración de lo irracional. En 1946 vio la luz Franckie y la boda, historia de una adolescente que, atormentada por la soledad y dividida entre el miedo y el ansia de medirse con la realidad, se hace ilusiones de poder compartir la nueva vida conyugal de su hermano.
La soledad es también el motivo central de los cuentos reunidos en La balada del café triste (1951), que deja al lector la desalentadora impresión de que cualquier intento de reunión entre opuestos resulta imposible. El relato largo que da título a la colección dramatiza, en un lenguaje estilizado por el ritmo hechicero, la historia de amor entre la virago Amelia y su primo Lymon, un jorobado-hombre-niño responsable de la transformación de la mujer/hombre en fuerza social y amorosa y luego de su ruina.
Reloj sin manecillas (1961), su última novela, transcurre en una pequeña ciudad del sur americano donde impera el odio racial y en la que aguardar la muerte simboliza la única posibilidad de sustraerse al callejón sin salida de una sociedad violenta y dividida. Póstumamente apareció el volumen de relatos El corazón hipotecado (1968), en el que están recopilados sus cuentos de juventud. Más tarde se editó su autobiografía inconclusa, que incluye la correspondencia que mantuvo con su marido durante la Segunda Guerra Mundial
La narrativa de Carson McCullers está emparentada con la de los grandes escritores del sur estadounidense y en ella se perciben puntos de contacto con la de W. Faulkner. Su impronta peculiar es la manera en que consiguió denunciar la injusticia, el odio racial y los graves problemas sociales que produjo la depresión económica de la década de 1930 en el "profundo sur", a través de los conflictos individuales que padecen los protagonistas de sus obras
(John Patrick McEnroe; Wiesbaden, 1959) Tenista estadounidense de origen alemán. Caracterizado por una obsesiva búsqueda de la perfección técnica y por los espectaculares arranques de cólera contra los árbitros en plena cancha, este genial zurdo tardó tan sólo tres años en ascender al primer puesto de la clasificación internacional de tenistas profesionales. Ganador de cuatro abiertos de los Estados Unidos y de tres torneos de Wimbledon, obtuvo 77 títulos individuales en toda su carrera. Fue una pieza clave en el equipo de copa Davis de su país, y es considerado por muchos el mejor jugador de dobles de todos los tiempos. Se retiró de la alta competición antes de alcanzar los treinta años