Militar italiano . Formó parte del mando italiano durante la Guerra de Libia (1911-12) y la Primera Guerra Mundial (1914-18). Pero permaneció al margen del entusiasmo que despertaron entre sus compañeros las hazañas de D’Annunzio y Mussolini en los años siguientes. No obstante, al instaurarse el fascismo fue nombrado mariscal y jefe de Estado Mayor (1922) y gobernador de Libia (1928-33).
Como jefe del ejército italiano dirigió la triunfal campaña de Abisinia de 1936. Pero juzgó con realismo que Italia no estaba preparada militarmente para los planes de guerra que albergaba Mussolini, razón por la que se enfrentó con el Duce a propósito de la participación en la Segunda Guerra Mundial (1939-45). Mussolini le hizo responsable del fracaso de la invasión de Grecia (1940), lo que motivó la dimisión de Badoglio.
Cuando Mussolini cayó, en 1943, el rey Víctor Manuel III le puso al frente del gobierno italiano, a fin de aprovechar su prestigio de militar profesional y moderado en beneficio de Italia cuando se completara la inminente derrota del Eje. Badoglio se apresuró a disolver el partido fascista y a firmar un armisticio por el que Italia cambiaba de bando, poniéndose de parte de los Aliados (si bien su gobierno, refugiado en Brindisi, no controlaba más que la mitad sur del territorio); ayudó así a las fuerzas anglo-americanas en su avance hacia el norte de Italia, ocupado por la Alemania nazi.
Ello no impidió que, terminada la guerra en 1944, tuviera que dejar el poder a un gobierno democrático; sus vinculaciones con el fascismo no fueron olvidadas en la posguerra, resultando privado de cargos y honores hasta que la Democracia Cristiana lo rehabilitó en 1948
(Maktala, 1893-Damasco, 1951) Nacionalista kurdo. Primer presidente de la Liga Nacional Kurda (1927) y primer editor, en 1932, de la revista bilingüe en kurdo y en francés Hawar, fue uno de los más destacados portavoces de la unidad y de la independencia del pueblo kurdo