Director y actor teatral francés. Con una energía vital y una pasión por el teatro poco comunes, Barrault, que se consideró discípulo de Artaud y de su "teatro de la crueldad", intentó realizar un teatro total, abierto al lenguaje del cuerpo y a todas las posibilidades de expresión, así como a todos los tipos de escritura teatral. Famoso a nivel internacional por su trabajo de mimo, su reputación como director y actor descansó en extraordinarias puestas en escenas que van de Shakespeare a los clásicos franceses, pasando por la comedia contemporánea y los trabajos experimentales de vanguardia.
Estudió arte y asistió a la École du Louvre, de París, hasta 1931. Ese año se matriculó en la escuela de teatro Théâtre de l´Atelier, de Charles Dullin, donde permaneció hasta 1935. Después se dedicó con particular empeño al estudio de las técnicas de pantomima junto con Étienne Decroux. Su primer espectáculo, Autour d´une mère, basado en una obra de Faulkner, era esencialmente gestual, y mereció la admiración de Artaud.
Su puesta en escena de Numance (1937) le hizo conocer a Claudel, autor muy importante en su carrera posterior. Entre 1940 y 1946 estuvo integrado en la Comédie Française, primero como pensionnaire, y luego como sociétaire, debutando como Rodrigo en Le Cid. Montó allí obras como Le Soulier de satin (El zapato de raso) de Claudel, y Phèdre, de Racine. Paralelamente, Barrault participó en clásicos del cine como la película de Carné Les enfants du paradis (Los niños del paraíso, 1944) en la cual apareció como Jean-Gaspard Debureau, un mimo del siglo XIX.
En 1946 él y su esposa, la actriz Madeleine Renaud, abandonaron la Comédie y formaron la compañía Renaud-Barrault en el Théâtre Marigny de París, donde permanecieron diez años. Fue famosa su interpretación de Hamlet en la traducción de André Gide. Fue nombrado director del Odéon-Théâtre de France en 1959 y del Théâtre des Nations en 1965, ambos patrocinados por el gobierno francés.
Durante todo este periodo, Barrault constituyó un verdadero repertorio sobre los criterios de la estabilidad de la compañía, las reposiciones y la alternancia. Sus espectáculos más notables fueron Hamlet, Les Fausses Confidences (1946), Le Procès (1948), L´Orestie (1955) y obras de Claudel como Partage de midi, L´Échange, Christophe Colomb, Le Soulier de satin y Tête d´or (1959).
Montó asimismo obras de vanguardia como Le Personnage combattant, de Vauthier (1956) y Rhinocéros (1960), de Ionesco, e invitó a otros directores. Roger Blin montó Oh les beaux jours, de Beckett (1963) y Les paravents, de Genet (1966), que provocó mucha controversia; Maurice Béjart dirigió un experimento de teatro total, La Tentation de saint Antoine (1967). Entre 1966 y 1968 se hizo cargo también del Théâtre des Nations, y llevó allí a Jerzy Grotowski, el Living Theatre, Peter Brook, y el Teatro Campesino.
Tras una disputa sobre su apoyo a los estudiantes que habían ocupado el teatro en mayo de 1968, Barrault dimitió como director del Théâtre des Nations, y junto con su mujer, retomó la compañía Renaud-Barrault. En 1968 montó Rabelais y Jarry en el Élysée-Montmartre (antigua sala de boxeo), y pasó por el Orsay antes de llevar, en 1981, al Théâtre du Rond Point (hoy Théâtre Renaud-Barrault) un teatro móvil que se había hecho construir. En este último periodo de su creación artística montó espectáculos a partir de una dramaturgia de textos no teatrales, como Ainsi parlait Zarathoustra (1974), Les Nuits de Paris (1976), Zadig (1979), y L´Amour de l´amour (a partir de textos de Apuleyo, La Fontaine y Molière, 1981). Después de tres giras importantes, la compañía Renaud-Barrault adquirió fama internacional
Aunque Barrault sea famoso a nivel internacional por su trabajo de mimo, su reputación como director y como actor abarca campos más amplios. Para él, el teatro es un acto de amor; de amor al texto, que le hace entregarse a su personaje y a su público. No entiende un teatro que divida, sino que busca la comunión con el espectador. Por eso los textos que seleccionaba para montar hablaban sobre la pasión y la vida en todas sus formas, especialmente a través del lenguaje del cuerpo, que él magnificó a lo largo de toda su carrera.
La importancia que daba al actor, "atleta afectivo" según la definición de su maestro Antonin Artaud, no le impidió utilizar medios escénicos tradicionales y contemporáneos (máscaras y danzas; luces, sonido, cine), renovando las imágenes teatrales. Su deseo de un teatro total explica el repertorio ecléctico al que se dedicó, y que abarcó todos los géneros y toda la historia del teatro, de la tragedia griega al teatro de boulevard, pasando por Shakespeare y el teatro del absurdo.
En este rasgo radica su interés por llevar a la escena obras completas (Rabelais, Jarry, Restif). Su contacto más fructífero fue con Claudel, cuya obra dio a conocer de manera esencial, y no tuvo inconveniente en abrir las puertas de su compañía a otros directores en creaciones más arriesgadas. Dirigió asimismo producciones para la Opera Metropolitana de Nueva York, y sus compañías hicieron giras por Estados Unidos. Entre sus libros destacan Reflexiones sobre el teatro (1959) y El teatro de Jean-Louis Barrault (1961), que expresan su devoción total por el teatro
(Saint-Denis, 1924) Político francés que ocupó, entre otros cargos públicos, el de primer ministro en el gabinete formado por Giscard d´Estaing. Hijo de un comerciante, estudió en el Liceo Leconte-de-Lisle en Reunión, y luego en la Facultad de Derecho y en el Instituto de Estudios Políticos de París, donde se diplomó en 1950. Desde 1951 impartió clases de Jurisprudencia en diversos centros: Instituto de Estudios Superiores de Túnez (1951-1954), Facultad de Derecho y Ciencias Económicas de la Universidad de Caen (1954-1963), Instituto de Estudios Políticos de París (IEP, 1961) y Facultad de Derecho y Ciencias Económicas de la Universidad de la Sorbona, París (1962), donde obtuvo la cátedra de Economía Política en 1963, que añadió a la que obtuvo en el IEP
En 1959 se introdujo en la política como director de gabinete del ministro de Justicia (hasta 1962), y sus servicios como experto en finanzas fueron solicitados en diversos organismos: el Comité Lorain para el estudio de la Hacienda y las Inversiones en Francia (1963-1964) y el Comité de Economía General y Financiación del V Plan, entre otros. De 1967 a 1972 fue vicepresidente de la Comisión Europea encargada de los Asuntos Económicos y Financieros, puesto desde el que propuso en 1969 un plan para la consecución de una unión económica y monetaria de los países de la CEE en la década de los setenta ("Plan Barre"), que, como otras iniciativas, fue discutido en diversos consejos de ministros y no llegó a aplicarse. En 1973 entró en el Consejo General del Banco de Francia y retomó sus actividades académicas
Tras haber servido como ministro de Comercio Exterior desde el 12 de enero de 1976 en el gobierno Chirac, el presidente Giscard d´Estaing lo nombró el 25 de agosto siguiente primer ministro y ministro de Economía y Finanzas, con la difícil misión de lanzar un plan de salvación de la economía francesa, gravemente aquejada por la elevada inflación, el déficit comercial y el alto índice de desempleo.
Barre, que en el momento de su nombramiento era esencialmente conocido por su condición de economista y divulgador, quiso fijar nuevos impuestos al patrimonio y las plusvalías, pero la reacción de los capitales, que amenazaron con salir del país, le obligó a dar marcha atrás. Aplicó sin embargo impopulares medidas antiinflacionarias y de austeridad en el gasto público, que provocaron la contestación sindical. Su gestión también encontró la hostilidad de los gaullistas de Chirac, formalmente integrados en la "mayoría de gobierno", que expresaban así su desagrado por la línea conciliadora con la OTAN y la CEE inaugurada por Giscard
El 31 de marzo de 1978 se desprendió de la cartera de Economía, pero continuó como primer ministro. En las elecciones legislativas del 12 y 19 de marzo de 1978 resultó elegido diputado por la circunscripción de Rhône 4 en las listas de la Unión por la Democracia Francesa (UDF, centro-derecha), socio de la Asamblea por la República (RPR, gaullista y conservador) en el gobierno de coalición
Con la victoria del Partido Socialista en las elecciones de 9 y 21 de junio de 1981, Barre dimitió el 13 de mayo siguiente y retomó su actividad docente, si bien siguió activo en la política. En 1988 fue nombrado presidente del Instituto de Estudios de Relaciones Internacionales (IERI) y de la Convención Liberal Europea y Social (CLES), en 1989 del Instituto Internacional del Derecho de Expresión Francés y en 1994 del Consejo de Supervisión de la localidad de Aspen.
Se presentó candidato por UDF a las elecciones presidenciales del 24 de abril de 1988 y quedó en tercer lugar con el 16,5 % de los votos tras Mitterrand y Chirac. En 1995 fue elegido alcalde de Lyon y retiró (6 de marzo) su candidatura por UDF a las presidenciales de abril de aquel año. En las elecciones legislativas de 1997 renovó su escaño por Rhône 4