Emperador bizantino (960-1025). Hijo de Romano II y de Teófano. Coronado emperador (960), compartió la regencia con su hermano Constantino a partir de 961, en que éste fue también coronado, y no comenzó su reinado personal hasta 985. Después de sofocar la rebelión de Bardas Skleros y Bardas Focas (987-989), destinada a hacerse con el imperio, puso en orden la situación interna de éste y sometió a la aristocracia. Se dedicó entonces a la política exterior, sobre todo al frente balcánico, donde por su crueldad mereció el apodo de Bulgaróctono (matador de búlgaros). Luchó asimismo en Siria, Armenia, Italia meridional y Sicilia, aquí contra los musulmanes. Combinando la guerra con la diplomacia, consiguió forjar un imperio que se extendía del Adriático a Armenia y dominaba toda la península Balcánica
(1415-1462) Gran príncipe de Moscú y de Vladímir (1425-1462). Hijo de Basilio I. En 1445 fue capturado por la Horda de Oro y liberado tras el pago de un fuerte rescate. Al año siguiente, Dimitri Shemiaka lo expulsó de Moscú tras arrancarle los ojos. En 1447 recuperó el trono y, a partir de 1450, consolidó su poder mediante la ejecución de los pretendientes al gran principado de Moscú. En 1452, permitió a Kasim crear el kanato de Kasímov, vasallo de Moscú