Compositor italiano. Hijo de un organista, estudió en el Colegio de San Sebastián de Nápoles, cuyo director era el célebre Zingarilli. Compuso música sacra (motetes, misas, etc.), de cámara y sinfónica, pero es la ópera el género musical que le dio fama. Sus óperas más conocidas son Adelson y Salvini (1824), El pirata (1827), La extranjera (1829), Capuletos y Montescos (1830), La sonámbula (1831), Norma (1831) y Los puritanos (1835). Su obra maestra es Norma, obra en la que destaca su obertura y en donde se conjuntan una gravedad clásica con un apasionamiento muy romántico en la expresión. Si en el siglo XIX fue Wagner su admirador más conocido, en el XX fue Stravinski quien reivindicó la facilidad de Bellini para la melodía, contraponiéndola a las dificultades que parecía encontrar Beethoven en este terreno
(Estocolmo, 1740- id., 1795) Poeta sueco. Célebre por sus canciones, recogidas en Epístolas de Fredman (1790) y en Cantos de Fredman (1791), que él mismo acompañaba con el laúd, fue admirado por los románticos