Conquistador español. Al parecer llegó a América en uno de los últimos viajes de Colón. En 1514 llegó con Pedrarias Dávila al Darién, donde fue nombrado capitán. En 1524 participó en la conquista de Nicaragua y fue nombrado alcalde de una de sus ciudades (León).
En el Darién tuvo ocasión de conocer a Diego de Almagro y a Francisco Pizarro, y se unió a ellos para conquistar el Perú. Fue enviado a Piura con el cargo de teniente gobernador; luego organizó por su cuenta la expedición de Quito, ciudad que había sido destruida por el general Inca Rumiñahui, y allí tuvo que hacer frente a la resistencia india.
Belalcázar logró sus propósitos en 1533 y quedó con plenos poderes en Quito, ciudad que cambió su emplazamiento y fue llamada San Francisco, en honor de Pizarro. A partir de entonces se dedicó a la exploración y colonización de los territorios de la zona y a la fundación de nuevas ciudades. Exploró la región de Pasto y los valles del Cauca y Magdalena, fundando Santiago de Guayaquil, Ampudia, Popayán, Ansema Guacayo, Neiva y Santiago de Cali, y llegó a penetrar en la sabana de Bogotá.
En 1539 se encontró con Gonzalo Jiménez de Quesada en las proximidades de Bogotá e hicieron su entrada juntos en Santa Fe; poco después embarcaron para legitimar sus derechos en España. En 1541 regresó con el título de Adelantado y Gobernador de Popayán y de un extenso territorio que comprendía parte de Colombia y Ecuador.
Belalcázar prosiguió la fundación de nuevas ciudades, se apoderó de Antioquia y mandó ejecutar a Jorge Robledo. Acusado de malos tratos a los indios y de la muerte de Robledo, fue encarcelado y condenado a muerte, pero fue absuelto por una apelación que se hizo al rey. En 1548 luchó junto con Núñez de Vela y Pedro de La Gasca para sofocar la Rebelión Pizarrista. Murió a causa de una enfermedad en Cartagena de Indias, cuando intentaba embarcar hacia España
(París, 1744- id., 1818) Arquitecto francés. El pabellón y los jardines ingleses de Bagatelle en el parisino Bois de Boulogne responden a su etapa de arquitecto de la corte de Luis XVI. Con la cúpula del mercado de trigo de París, propulsó la renovación de las técnicas constructivas