Reina de Castilla. Hija del duque Pedro de Borbón y de Isabel de Valois, contrajo matrimonio con Pedro el Cruel de Castilla (1353). Éste la abandonó tres días después y la hizo encarcelar para casarse con Juana de Castro (1354). Murió, quizás asesinada por orden del rey, en su prisión de Medina Sidonia
(Palencia, 1188-Maubuisson, Francia, 1252) Infanta de Castilla. Hija de Alfonso VIII de Castilla, casó con Luís VIII, hijo de Felipe II de Francia. La prematura muerte de su marido la obligó a encargarse de la regencia durante la minoría de edad de su hijo Luis, enfrentándose a la nobleza feudal francesa, que veía con creciente hostilidad el aumento del poder real durante los últimos reinados. Su condición de extranjera y su ascendencia Plantagenet –su madre era Leonor de Inglaterra– fueron algunos de los argumentos utilizados en su contra. Sin embargo, gracias a su innegable genio político, logró imponerse a la oposición nobiliaria. Consiguió atraer al bando monárquico al conde de Champaña y con su ayuda derrotó a los rebeldes y pacificó el reino, que entregó a su hijo en 1235