Bacteriólogo belga. Se licenció en Medicina en Bruselas, en 1892, donde fue profesor de parasitología y bacteriología, y fue nombrado director del Instituto Pasteur del Brabante
Bordet observó que si el suero sanguíneo es llevado a la temperatura de 55°C, sus anticuerpos no son destruidos, aunque sí se extingue su capacidad para destruir bacterias. De ello dedujo que en el suero existía cierto componente sensible al calor, al que llamó complemento. En 1901 demostró que este complemento era consumido en la reacción de un anticuerpo con un antígeno, proceso que se conoce como fijación del complemento, fundamental en inmunología.
Bordet pensó que sólo existía un único complemento. Hoy sabemos que existen nueve tipos de complementos, siendo cada uno de ellos un sistema enzimático responsable de la destrucción de una determinada gama de agentes patógenos. Descubrió además, junto a Genou, el microorganismo causante la tosferina. Por sus investigaciones y descubrimientos en el campo de la inmunología le fue concedido el premio Nobel de Fisiología y Medicina en 1919. De entre sus obras destaca Tratado de la inmunidad en las enfermedades infecciosas (1920).
(Izeste, 1722-París, 1776) Médico francés. Máximo definidor del vitalismo de Montpellier, estudió la doctrina del pulso y de las crisis