Religioso, predicador y escritor francés. Discípulo de los jesuitas, fue arcediano en Metz. De regreso a París (1659) y entregado a la oratoria sagrada, su fama se extendió gracias a sus sermones fúnebres, como el dedicado a Ana de Austria (1667).
Jacques Bossuet
En 1670 Luis XIV le nombró preceptor del delfín, a quien dedicó diez años de su vida y obras como el Discurso sobre la historia universal (1681). Concluida esta misión, fue nombrado obispo de Meaux (1681). Intervino en la Asamblea del clero, combatió la Reforma protestante y, oponiéndose a su amigo Fénelon, intervino en la querella del quietismo.
Enemigo del teatro por considerarlo inmoral (lo criticó acerbamente en Maximes et réflexions sur la comédie, obra de 1694), en el último período de su vida retornó a la predicación. Entre sus muchas obras cabe destacar, aunque inacabada y editada tras su muerte, Politique tirée des propes paroles de l´Ecriture Sainte (1709)
(Laurel, 1939) Atleta norteamericano especializado en salto de longitud. En 1960, tan sólo dos semanas antes del comienzo de los Juegos de Roma, había batido el récord de salto de longitud con un extraordinario vuelo de 8,21 metros, plusmarca que ostentaba Jesse Owens desde hacía veinticinco años. Fue segundo en Tokio 64 y tercero en 1968, año en que, como titular del récord mundial de 8,35 metros, fue testigo del increíble salto de Bob Beamon en Ciudad de México.