Escritor esloveno. Fue uno de los más ilustres renovadores de la literatura eslovena de los primeros años del siglo actual. Estudió en Vrhnika y Lubiana, y se matriculó en el Politécnico de Viena. Sin embargo, la literatura y el periodismo le alejaron muy pronto de las aulas universitarias.
Todavía joven, había empezado a escribir poesías épicas bajo la influencia de Askerc; luego pasó a la lírica, y unió su propia labor literaria a la de su joven amigo Dragotin Kette. Con éste, Murn y Zupancic inició el movimiento de reacción frente al realismo que la historia de la literatura eslovena habría de consagrar posteriormente con el nombre de "moderna". En Viena, donde residió muchos años, empezó a componer versos según el estilo de Heine y de los decadentes franceses.
En 1899 aparecieron sus poesías juveniles en un libro titulado Erotika. La audacia de las expresiones y de las imágenes le atrajo la antipatía de los católicos; el obispo de Lubiana hizo comprar toda la edición (salvo 300 ejemplares ya vendidos), que fue quemada públicamente el día de Pascua. En 1900, en un famoso artículo, Ivan Cankar proclamó el alejamiento de su generación respecto de Askerc, quien hasta entonces había animado el sector progresista de la intelectualidad eslovena. En los primeros años del siglo se interesó en Viena por los problemas sociales de la época.
Finalmente dejó la poesía y se dedicó a la prosa, en la que destacaría con obras como El criado Bartolo y su derecho, La casa de María Auxiliadora, Visiones y sueños y otras, muy pronto traducidas a diversas lenguas. La influencia de Ibsen le indujo a componer textos dramáticos. En 1907 volvió a su patria y se presentó, aun cuando sin éxito, como candidato socialista al Parlamento. Vivió los últimos años de su existencia en Lubiana y sus cercanías
(Cataguases, 1908) Filósofo brasileño. En sus inicios, mantuvo tesis cercanas al existencialismo fenomenológico. Es autor de Seis temas del espíritu moderno (1941) y de una Introducción a la filosofía científica (1956)