Papa (708- 715). Originario de Siria, vivió en Nicomedia (710-711). Mantuvo buenas relaciones con el emperador Justiniano II y logró que éste revocara los acuerdos del concilio Quinisexto (692). En cambio, persiguió el monotelismo que intentó favorecer el sucesor de Justiniano, Filípicos Bardano
(Atenas, 1868 - Palermo, 1923) Rey de Grecia, hijo de Jorge I y Olga de Rusia. En 1889 se casó en Atenas con Sofía, princesa de Prusia, hermana de Guillermo II de Alemania, con la que tuvo tres hijos varones: el príncipe heredero Jorge II (en quien abdicó en 1922), Alejandro I (que reinó efímeramente entre 1917 y 1920, fecha de su muerte y en la que Constantino retomó el trono), y Pablo I (que sucedió a su hermano Jorge II en 1947), además de una hija, la princesa Elena (1896-1982)
Antes de suceder a su padre en 1913, mandó los ejércitos griegos en la guerra contra Turquía (1897), en la que fracasó, y participó en la Guerra Balcánica (1912-1913), por la que recibió alabanzas y fue aclamado como héroe nacional. Ascendió al trono tras el asesinato de su padre en 1913 y durante su reinado logró ampliar el territorio nacional con sus victorias sobre los turcos y búlgaros y mediante los tratados de Londres y Bucarest.
Su acercamiento a los alemanes durante la Primera Guerra Mundial le costó el destierro en Suiza en 1917. A la muerte de su segundo hijo Alejandro I, que había permanecido en el trono durante su exilio, volvió a ceñir la corona en 1920. Derrotado en una de sus campañas contra los turcos en 1922 y ante las revueltas civiles y militares, volvió a abdicar, esta vez en su primogénito Jorge II. Se retiró a Sicilia, donde murió en 1923.