Rey de Sicilia peninsular (1458-1494). Calixto III esgrimió su condición de bastardo para poner en duda sus derechos al trono. Pío II le dio la investidura (1458) y le sostuvo contra Juan de Anjou. Luchó contra los turcos que se hicieron con Otranto (1480), pero fueron expulsados de allí (1481) gracias a la ayuda de Sixto IV y Fernando el Católico. Fue un hábil político y uno de los primeros soberanos renacentistas. Le sucedió su primogénito Alfonso II
(Florencia, 1610- id., 1670) Gran duque de Toscana (1621-1670). Hijo de Cosme II. Dominado por el clero, fue incapaz de proteger a Galileo, a quien admiraba