Político griego. Mantuvo en su poder el tesoro de guerra de Lisímaco. Consiguió ser independiente, aunque no se atribuyó el título de rey al permanecer bajo la soberanía teórica de Antíoco I
(s. VIII) Emperador bizantino (711-713) de origen armenio. Se rebeló en Quersoneso (710) y derrotó a Justiniano II, pero no pudo controlar el Imperio. Favoreció a los adeptos de la doctrina monotelita