Filósofo y escritor de origen caucásico. Preocupado por descubrir el sentido real de la presencia humana, es autor de Relatos de Belcebú a su nieto y La vida sólo es real cuando «yo soy»
(Vitoria, 1886 - Madrid, 1961) Compositor y músico español. Biznieto del famoso compositor Nicolás Ledesma, tomó sus primeros cursos de música en Bilbao, donde compuso sus primeras partituras y ganó los Juegos Florales de 1902. Estudió con Vincent d´Indy en la Schola Cantorum de París, con Joseph Jongen en Bruselas y con Otto Neitzel en Colonia. Regresó a la capital vizcaína en 1909, para hacerse cargo de la Sociedad Coral Bilbaína y alternar su carrera de director de orquesta con la de organista. En 1914 ganó una cátedra en el Conservatorio de Madrid, con el que estuvo vinculado hasta su fallecimiento.
Autor de una extensa y variada obra, Jesús Guridi cultivó distintos géneros musicales. Combinó piezas para arpa, txistu o piano con composiciones orquestales, como La aventura de Don Quijote (1915), Diez melodías vascas (1941), Sinfonía pirenaica, o Fantasía de Walt Disney (1956), donde está presente su admiración hacia el compositor Turangila. Concibió también una obra coral titulada Eusko Irudariak (Escenas vascas) (1922) pero, no obstante, Guridi fue básicamente conocido por sus incursiones en el mundo del teatro musical y de la zarzuela.
Mirentxu (1911) fue su primera zarzuela. Se estrenó en Bilbao y contó con la colaboración del escritor Jesús María Arozamena, en la elaboración de los textos. En Amaya (1920) el autor partió de la escritura de Francisco Navarro Villoslada, para redactar parte del libreto en euskera y dejarse influenciar por el estilo de Wagner. Cautivado por las escenas de tipo costumbrista y por el folclore vasco, Jesús Guridi escribió su tercera obra musical en 1925, titulándola El caserío.
Otras piezas de teatro musical compuestas por el autor son La meiga (1928), basada en el cancionero gallego, La cautiva (1931), Mandolinata (1934), recogiendo parte de las canciones renacentistas italianas, Mari Eli (1936), La bengala (1939), el sainete Déjame soñar (1943), Peñamariana (1944), donde recrea varias farsas salmantinas, y la comedia La condesa de la aguja y el dedal (1950).
La actividad creadora del maestro vasco estuvo siempre marcada por el perfeccionismo de sus trabajos y por su incesante búsqueda de nuevas sonoridades, tomando como punto de partida los motivos de la canción popular vasca. Jesús Guridi acumuló numerosos galardones a lo largo de su vida. Dirigió, además, el Conservatorio de Madrid, fue miembro de la Real Academia de Bellas Artes y ejerció como directivo de la Sociedad General de Autores. Cabe mencionar también su Cuarteto en la menor