Pianista polaco, nacionalizado estadounidense en 1926, que en ocasiones utilizó el seudónimo de Michel Dvorsky. Su padre, Kazimierz, era director de orquesta del Teatro de Cracovia y su madre, Matylda, cantante de ópera. A muy temprana edad, Josef Casimir comenzó sus primeras lecciones de música de la mano de su padre
A los siete años ya realizaba giras como pianista por Europa y fue considerado un niño prodigio. En 1887 debutó con gran éxito de público en el Metropolitan de Nueva York, y pronto decidió trasladarse a Alemania para continuar con sus estudios. En 1892 comenzó a estudiar piano con Anton Rubinstein, quien influyó poderosamente en su concepción de la música
Su reaparición en público tuvo lugar en 1894 en la ciudad alemana de Dresde. Dio exitosos recitales a lo largo de Europa Central, Sudamérica y los Estados Unidos. Su labor pedagógica la desarrolló entre 1926 y 1938 como director del Curtis Institute of Music de Philadelphia, prestigiosa institución musical donde se formaron artistas de renombre. A partir de la década de los años cuarenta decidió reducir paulatinamente sus compromisos musicales hasta su retirada en 1946
Fue uno de los más grandes pianistas de la escuela romántica. Poseía una extensión de matices muy amplia y era capaz de dotar a las piezas de un intenso contenido emocional. En 1887 se convirtió en el primer músico profesional en realizar una grabación. Hoffman compuso más de un centenar de obras bajo el seudónimo de Michel Dvorsky. Entre su producción se cuentan conciertos para piano, sonatas y una sinfonía. También escribió piezas breves para piano y dos libros sobre técnica pianística titulados Piano Playing (Nueva York, 1908) y Piano Questions Answered (Nueva York, 1909)
(Viena, 1874-Rodaun, Austria, 1929) Escritor austriaco. Su primer drama en verso se representó cuando sólo tenía diecisiete años. A Ayer (1891) siguieron La muerte de Tiziano (1892), El loco y la muerte (1893) y El pequeño teatro del mundo (1897), que giraban en torno a las transformaciones que sufre la personalidad del individuo y la tensión entre realidad y apariencia. Posteriormente escribió algunas versiones de tragedias antiguas, como Electra (1904), que Richard Strauss convertiría en ópera. Con Strauss colaboró escribiendo los libretos de las óperas El caballero de la rosa (1911), Ariadna en Naxos (1912) y La mujer sin sombra (1919), entre otras. Tras componer algunas obras en prosa, volvió al drama con Cada cual (1911) y La torre (1925). Fue uno de los fundadores del Festival de Salzburgo