Pintor naturalista norteamericano considerado, junto con Thomas Eakins, uno de los más grandes artistas norteamericanos del siglo XIX. Fue el segundo de los tres hijos varones de Henrietta Benson y Charles Savage Homer. Su formación fue prácticamente autodidacta. Trabajó como aprendiz de un litógrafo de Boston, John H. Bufford, y tomó algunas lecciones de pintura de Frédéric Rondel. Tras este breve aprendizaje, en 1857 comenzó a trabajar como ilustrador de revistas, y se convirtió en un colaborador asiduo de la conocida Harper´s Weekly. Sus ilustraciones se caracterizaron por los contornos nítidos, formas sencillas, contraste de luces y sombras, y por los personajes llenos de vida. Tales características iniciales, se convirtieron en una constante de su producción a lo largo de toda su carrera artística.
En 1859 se trasladó a la ciudad de Nueva York, donde comenzó su carrera como pintor. Durante la Guerra Civil, visitó en repetidas ocasiones el frente de Virginia y sus primeras composiciones tenían como tema la guerra. En 1875 envió su último dibujo al Harper´s Weekly, y abandonó definitivamente su carrera como ilustrador. Durante la década de 1870 los temas predominantes de sus obras fueron los de inspiración rural o idílica: escenas de la vida agrícola, niños jugando y escenas de lugares conocidos poblados de mujeres elegantes.
Recorrió los estados de Nueva York, Virginia y Massachusetts, y en 1881 comenzó una estancia de dos años en Inglaterra, donde vivió en Cullercoats, un pueblo de pescadores cerca de Newcastle. Esta estancia provocó un cambio definitivo en la temática de su obra. A partir de entonces se concentró en escenas de la naturaleza a gran escala, en particular marinas y escenas costumbristas de pescadores.
De vuelta en Estados Unidos, en 1883, fijó su residencia en Prout´s Neck, un solitario pueblo en la costa de Maine, donde viviría el resto de su vida. Fue aquí donde pintó algunas de las consideradas obras maestras del realismo americano, tales como Eight Bells (1886). En 1890 pintó la primera de su admirada serie de marinas en Prout´s Neck. De 1899 es una de sus obras más impresionantes, La corriente del Golfo, en la que un solitario marinero negro navega en una embarcación rodeada de tiburones en medio de un mar con fuerte oleaje. La grandiosidad de su temática y la fuerza expresiva de sus obras ejercieron una gran influencia en la pintura realista de Estados Unidos
(s.VIII a.C.) Poeta griego. En palabras de Hegel, Homero es «el elemento en el que el mundo griego vive como el hombre vive en el aire». Admirado, imitado y citado por todos los poetas, filósofos y artistas griegos que le siguieron, es el poeta por antonomasia de la literatura clásica, a pesar de lo cual la biografía de Homero aparece rodeada del más profundo misterio, hasta el punto de que su propia existencia histórica ha sido puesta en tela de juicio
Homero
Las más antiguas noticias sobre Homero sitúan su nacimiento en Quíos, aunque ya desde la Antigüedad fueron siete las ciudades que se disputaron ser su patria: Colofón, Cumas, Pilos Ítaca, Argos, Atenas, Esmirna y la ya mencionada Quíos. Para Simónides de Amorgos y Píndaro, sólo las dos últimas podían reclamar el honor de ser su cuna.
Aunque son varias las vidas de Homero que han llegado hasta nosotros, su contenido, incluida la famosa ceguera del poeta, es legendario y novelesco. La más antigua, atribuida sin fundamento a Herodoto, data del siglo V a.C. En ella, Homero es presentado como el hijo de una huérfana seducida, de nombre Creteidas, que le dio a luz en Esmirna. Conocido como Melesígenes, pronto destacó por sus cualidades artísticas, iniciando una vida bohemia. Una enfermedad lo dejó ciego, y desde entonces pasó a llamarse Homero. La muerte, siempre según el seudo Herodoto, sorprendió a Homero en Íos, en el curso de un viaje a Atenas
Los problemas que plantea Homero cristalizaron a partir del siglo XVII en la llamada «cuestión homérica», iniciada por François Hédelin, abate de Aubignac, quien sostenía que los dos grandes poemas a él atribuidos, la Ilíada y la Odisea, eran fruto del ensamblaje de obras de distinta procedencia, lo que explicaría las numerosas incongruencias que contienen
Sus tesis fueron seguidas por filólogos como Friedrich August Wolf. El debate entre los partidarios de la corriente analítica y los unitaristas, que defienden la paternidad homérica de los poemas, sigue en la actualidad abierto