Rey de Italia. Hijo de Victor Manuel III de Italia y de Elena de Montenegro, ocupó el trono italiano tras la abdicación de su padre en 1944. Fue nombrado príncipe heredero con el título de príncipe de Piamonte y, siguiendo la tradición de la Casa de Saboya, estudió la carrera militar. En 1930 se casó con María José del Belgio (1906-2001) hija del rey belga Alberto I, que sería conocida como la reina rebelde por su actitud contraria al régimen fascista de Mussolini. Al año siguiente fue nombrado general de brigada y en 1936 obtuvo el cargo de comandante del cuerpo de la armada. En 1940 participó en la Segunda Guerra Mundial como comandante del grupo occidental de la armada pero de manera no activa, lo que puso de manifiesto sus disensiones con el régimen
El 8 de septiembre de 1943, tras conocerse la firma del armisticio por Eisenhower y su confirmación por el mariscal Badoglio, huyó junto con toda la familia real italiana y se refugió en Brindisi, después de que su padre le negara el permiso para permanecer en Italia entre los combatientes; este hecho le sería reprochado enormemente tras su subida al trono. En abril de 1944 el príncipe heredero, Humberto, fue nombrado lugarteniente general del reino y le fueron concedidos íntegros los poderes de la corona, aún conservando Víctor Manuel el título de rey
Una vez liberada Roma (4 de junio de 1944), Badoglio designó al príncipe Humberto como su sucesor más indicado y el general MacFarlane le nombró con la intención de que concentrase en sus manos los ministerios de Interior y Asuntos Exteriores. Humberto II accedió formalmente al trono de Italia a principios de mayo de 1946. Pero la monarquía italiana estaba sentenciada y, aunque el papa Pío XII instó al electorado a que votase por el cristianismo y no por el materialismo (una argucia para retener en el poder a Humberto), el referéndum del 2 de junio del mismo año dio el triunfo a la república por un ajustado resultado.
El rey impugnó las elecciones, pero las autoridades de ocupación aliadas fueron inflexibles y el primer ministro, Alcide Gasperi, le ordenó que abandonara Italia. Por su corto reinado de veintiséis días fue conocido como el Rey de Mayo. El 7 de junio embarcó camino del destierro junto con su esposa, la reina María José. Nunca volvería a Italia. Se exilió a Cascáis (Portugal), donde tomó el nombre de conde de Sarre, y años después a Ginebra (Suiza) donde murió en 1983
(Berlín, 1769-id., 1859) Naturalista y explorador alemán. Recibió una excelente educación en el castillo de Tegel y se formó intelectualmente en Berlín, Frankfurt del Oder y en la Universidad de Gotinga. Apasionado por la botánica, la geología y la mineralogía, tras estudiar en la Escuela de Minas de Freiberg y trabajar en un departamento minero del gobierno prusiano, en 1799 recibió permiso para embarcarse rumbo a las colonias españolas de América del Sur y Centroamérica.
Acompañado por el botánico francés Aimé Bonpland, con quien ya había realizado un viaje a España, recorrió casi diez mil kilómetros en tres grandes etapas continentales. Las dos primeras en Sudamérica, desde Caracas hasta las fuentes del Orinoco y desde Bogotá a Quito por la región andina, y la tercera por las colonias españolas en México.
Como resultado de su esfuerzo, logró acopiar cantidades ingentes de datos sobre el clima, la flora y la fauna de la zona, así como determinar longitudes y latitudes, medidas del campo magnético terrestre y unas completas estadísticas de las condiciones sociales y económicas que se daban en las colonias mexicanas de España. Entre 1804 y 1827 se estableció en París, donde se dedicó a la recopilación, ordenación y publicación del material recogido en su expedición, contenido todo él en treinta volúmenes que llevan por título Viaje a las regiones equinocciales del Nuevo Continente.
De entre los hallazgos científicos derivados de sus expediciones cabe citar el estudio de la corriente oceánica de la costa oeste de Sudamérica que durante mucho tiempo llevó su nombre, un novedoso sistema de representación climatológica en forma de isobaras e isotermas, los estudios comparativos entre condiciones climáticas y ecológicas y, sobre todo, sus conclusiones sobre el vulcanismo y su relación con la evolución de la corteza terrestre.
En 1827 regresó a Berlín, donde desempeñó un destacado papel en la recuperación de la comunidad académica y científica alemana, maltratada tras décadas de conflicto bélico. Fue nombrado chambelán del rey y se convirtió en uno de sus principales consejeros, por lo que realizó numerosas misiones diplomáticas. En 1829, por encargo del zar, efectuó un viaje por la Rusia asiática, en el curso del cual visitó Dzhungaria y el Altai.
Durante los últimos veinticinco años de su vida, se concentró principalmente en la redacción de Cosmos, monumental visión global de la estructura del universo, de la que en vida vio publicados cuatro volúmenes. Humboldt está considerado como uno de los últimos grandes ilustrados, con una vasta cultura enciclopédica, cuya obra abarcaba campos tan dispares como los de las ciencias naturales, la geografía, la geología y la física