Pintor flamenco. Fue discípulo de Gerard David, al que imitó, aunque su estilo se relaciona también con Benson y con el Maestro de las Medias Figuras. La obra de Isenbrandt ha planteado numerosos problemas a los investigadores. Por evidencias documentales se sabe que fue un artista destacado en su época; sin embargo, apenas han podido identificarse cuadros suyos con total certeza. Se cree que dirigió un taller especializado en pintura de temas religiosos y cuadros de devoción, en el que se siguió un estilo conservador, en la línea de los flamencos primitivos. Suele atribuírsele el díptico de la Virgen de los siete dolores (hacia 1528)
(Isfahán, 897 - Bagdad, 967) Escritor árabe. Estaba emparentado con los Omeyas y mantuvo relaciones con los descendientes de esta dinastía, que reinaban en España. Esta ascendencia no deja de tener su significado para comprender la gran obra de recopilación de las tradiciones poéticas árabes que, encuadrada en el ambiente histórico y cultural en que se desenvuelve y adornada con el anecdotario típico de tal género de literatura, constituye el máximo documento de que se dispone para la reconstrucción de las costumbres y de la cultura árabes desde la época preislámica al siglo III del Islam.
No fueron extrañas al carácter enciclopédico de la obra la educación y la mentalidad literarias de la época, con las que el poeta se puso en contacto primero como estudiante en Bagdad, y más tarde como literato en las cortes de Alepo y Bagdad.
Mucho más singular es, teniendo en cuenta sus antecedentes omeyas, su posición favorable a la heterodoxia chiita, que asoma ya en su obra más importante, y que se concreta en los históricos Maqatil at-Talibiyyin, fuente poco utilizada, pero de extraordinario relieve para aclarar, como reflejo de una tradición opuesta a la dominante, las vicisitudes de aquel movimiento político y religioso