Platero y broncista español. Trabajó en piezas de tipo religioso que le encargaron por toda España, aunque su lugar fundamental de trabajo fue Barcelona, lo que hizo que se convirtiera en uno de los mejores representantes de la platería moderna de este país. Entre sus obras destacaron una custodia para el altar mayor de la catedral de La Habana; unas nadas renacentistas para la catedral de Plasencia; un tocador estilo Luis XVI dedicado a la reina María de las Mercedes; una lámpara gótica para la iglesia del Pino de Barcelona; unas coronas votivas para la Virgen de la Angustias de Granada; y la verja de bronce del presbiterio de la catedral de Zaragoza. Fue premiado en numerosas exposiciones, tanto nacionales como internacionales. Algunos de los premios que obtuvo fueron las medallas de la Academia Agrícola, Manufacturera y Comercial de París; la de la Exposición Universal de 1855; la medalla de plata en la Exposición de Sevilla de 1858 y en Portugal en 1861; de segunda clase en Londres en 1862 y en París en 1869; medalla de mérito en la Exposición de Viena de 1873 y la Cruz de Isabel la Católica
(Madrid, 1886 - 1966) Actor cómico español. Estudió Comercio y obtuvo el título de la Escuela Central. Llegó al teatro a los 19 años, cuando debutó con la compañía del Teatro Apolo; luego pasó a la compañía del Teatro Lara de Madrid, con la que visitó Hispanoamérica y recorrió España con distintas obras, hasta que en 1935 formó su propia compañía.
Sus primeros contactos con el cine se limitaron a la película rodada en 1912 Asesinato y entierro de don José de Canalejas, en la que interpretaba al personaje del asesino, Pardiñas, y por la que cobró 100 pesetas; siguieron algunas películas mudas y su trabajo en Francia, en los estudios de la Paramount, realizando las versiones castellanas de los éxitos de Hollywood.
José Isbert (centro) en ¡Bienvenido, Mister Marshall!
Pero el trabajo continuado y la fama de José Isbert como actor de cine llegaron con la posguerra. Primero con varios papeles secundarios, y luego en varios papeles protagonistas como los que interpretó en ¡Bienvenido, Mister Marshall! o El verdugo (1963). Otras películas importantes en que participó fueron Calabuch (1956), Los jueves, milagro (1957), Historias de la radio (1955), El cochecito (1960), La gran familia (1962) y Los dinamiteros (1963)
Su peculiar físico y su voz lo convirtieron en uno de los actores preferidos del público, en especial por su sentido del humor. Creador de una saga de artistas, es el padre de la actriz María Isbert y abuelo del actor Tony Isbert.