Científico alemán. Cursó la carrera de Física en la Universidad de Braunschweig, y más tarde, en el Instituto de Física de Wurzburg, en el que ingresó posteriormente, en 1972, como físico auxiliar. Amplió estudios en la Universidad de Oxford durante los años 1975 y 1976. En 1978 terminó su tesis doctoral, por la que obtuvo una beca para investigación física.
Klaus Von Klitzing
Durante dos años, realizó investigaciones en Grenoble, donde cuantificó el Efecto Hall. De 1980 a 1984 continuó sus investigaciones fundamentales en la Universidad de Múnich. En 1985 le fue concedido el Premio Nobel de Física por su descubrimiento sobre los métodos de medición de la resistencia eléctrica de los materiales, de vital importancia para la fabricación de semiconductores y de cierto tipo de láseres.
Pero uno de los principales méritos de Klitzing fue el haber cuantificado el llamado Efecto Hall, descubierto hace un siglo por el físico estadounidense de este nombre, mediante experimentaciones en sistemas bidimensionales de electrones. Esta cuantificación del Efecto Hall, que reveló un comportamiento del fenómeno con arreglo a unos valores escalonados, abre una brecha en la investigación de un ámbito particularmente importante y actual, ya que sus aplicaciones se refieren a los semiconductores, elementos imprescindibles en la fabricación de ingenios cibernéticos.
La labor de este científico alemán se inscribe en los esfuerzos, actualmente desplegados en Europa Occidental, sobre las tecnologías punta y los nuevos materiales. La norma de medición ya ha sido introducida en laboratorios de Alemania, Francia, Estados Unidos, Japón, Canadá y Australia.
(Quedlinburg, actual Alemania, 1724-Hamburgo, 1803) Poeta y dramaturgo alemán. Considerado por J. J. Bodmer como un «poeta de la religión y de la patria», marcó un etapa decisiva en la historia de la literatura de su país, al iniciar el retorno a los orígenes germánicos y contribuir a la afirmación de la originalidad nacional alemana. Ello no le impidió mantener intacto su espíritu cosmopolita y celebró, como tantos escritores y filósofos alemanes de su época, el advenimiento de la Revolución Francesa, lo que le valió ser nombrado ciudadano de honor de la República (1792). Más adelante condenaría los excesos de la época del Terror. Su La Mesíada (1748-1777), poema épico religioso cuya exaltación mística responde a los cánones del pietismo predominante en su época, consagró su fama literaria. También escribió Odas y tragedias bíblicas (Salomón, 1764; David, 1772)