Geógrafo granadino. Autor de una descripción de África que fue tomada como ejemplo por los humanistas del Renacimiento
(Ciudad de Guatemala, 1943 - Miami, 2002) Político guatemalteco, presidente de la República desde junio de 1993 hasta enero de 1996. Licenciado en Derecho, fue profesor de Ciencias Sociales y Legales en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Rafael Landívar. En 1967 se integró en la administración como asesor en la División del Mercado Común del Ministerio de Economía. En 1969 pasó al secretariado permanente del Comité de Aranceles y un año después al Comité Nacional de Integración Económica. Posteriormente fue secretario general del Consejo de Estado (1974-1978), asesor legal (1978-1981) y administrador general de la Asociación Azucarera Guatemalteca (1981-1983).
En 1983 se implicó formalmente en la política y cofundó la Unión Nacional de Centro (UNC), de la que fue secretario general hasta 1986. Miembro de la Asamblea Nacional Constituyente entre 1984 y 1986, en 1985 fue candidato a la vicepresidencia junto al líder de UNC, Jorge Carpio, un pariente suyo que también sería candidato en 1990 y que fue asesinado el 2 de julio de 1993, pocas semanas después de llegar a la presidencia Ramiro de León. En 1988 dirigió el Instituto de Educación Cívica y Política y posteriormente fue nombrado procurador general de Derechos Humanos.
Desempeñaba este puesto cuando se produjo el autogolpe del presidente Jorge Serrano el 25 de mayo de 1993, quien disolvió el Parlamento, suspendió la Constitución y ordenó el arresto de los responsables de los órganos judiciales; Ramiro de León, primero de esta "lista negra", pudo escapar de sus captores a través del tejado de su domicilio. Tras unos días de confusión y ante el clamor unánime de la sociedad civil, Serrano dimitió y huyó del país el 1 de junio. Cinco días después Ramiro de León fue elegido por el Congreso presidente de la República para el período que restaba del mandato de Serrano, dos años y medio.
En este tiempo anunció una "cruzada" contra la impunidad y la corrupción, reestructuró la cúpula del Ejército, relanzó decisivamente las negociaciones de paz con la guerrilla y promovió una reforma constitucional que debía sancionar el "impulso ético" y la "depuración de las instituciones" que prometió en su toma de posesión. Las enmiendas fueron aprobadas por el Congreso el 27 de noviembre de 1993 y sometidas a referéndum el 30 de enero de 1994.
La consulta, pésimamente organizada (las papeletas no se tradujeron a las lenguas indígenas, por lo que se privó del voto a este numeroso electorado), constituyó un fracaso para Ramiro de León, que apenas consiguió un 17 % de participación, "ganando", eso sí, con el 67,6 % de los votos emitidos. El 14 de agosto de 1994 se celebraron elecciones legislativas, fruto, junto a la disolución anteriormente del Congreso y el Tribunal Supremo, de un acuerdo de Ramiro de León con las fuerzas políticas, que habían resistido su exigencia del 27 de agosto de 1993 de una dimisión colectiva de los diputados y magistrados de ambos órganos.
El 12 de noviembre de 1995 se celebraron elecciones presidenciales, ganadas por Alvaro Arzú, a quien Ramiro de León Carpio transfirió la banda presidencial el 14 de enero de 1996. En su salida, la opinión pública coincidió en una valoración positiva de su gestión, que permitió la normalización política y constitucional del país, y aún fortalecer el sistema democrático. Durante su última etapa, fue diputado en el Congreso por el Frente Republicano Guatemalteco (FRG), liderado por el ex dictador Ríos Montt, y su prestigio político perdió algunos enteros