Bailarín y coreógrafo francés de origen ruso. Fue alumno de B. Nijínskaia. Instalado en Francia desde 1923, colaboró con los Ballets Rusos de Diáguilev y en las óperas de París y de Montecarlo. Dio prioridad a la danza sobre la música y el decorado y evitó la pantomima. Es autor de numerosas obras teóricas (Danza académica, 1949; Historia del ballet, 1966)
(Madrid, 1890-1968) Actor de cine y teatro español; formando pareja con la artista Imperio Argentina, fue uno de los intérpretes más populares del cine anterior a la Guerra Civil. Miembro de una compañía teatral infantil, su debut tuvo lugar en el Teatro El Dorado de Madrid. En 1917 figuraba como primer actor cómico en la compañía de Enrique Lacasa, en la que interpretaba papeles de galán dentro del género chico y la revista. Durante los años veinte realizó giras por tierras sudamericanas que le dieron fama el otro lado del Atlántico.
En 1926 debutó en el cine con la película muda argentina Frivolinas, de Arturo Caballero, pero, ante la falta de una industria cinematográfica española propia, en 1930 pasó a trabajar para los estudios Paramount en Joinville (Francia), que por entonces realizaban películas en castellano para los países hispanos. De este período son Doña Mentiras de A. Millar, ¡Salga de la cocina! de P. Infante y La canción de las naciones de M. Gleize, F. Gargallo y R. Meinert.
En 1931 se trasladó a Hollywood contratado por la Fox, donde intervino en cuatro películas, y dos años después regresó a España para protagonizar una serie de largometrajes de gran éxito: El novio de mamá (1933), La hermana San Sulpicio (1934), Nobleza baturra (1935) y Morena Clara (1936), todas ellas junto a Imperio Argentina y dirigidas por Florián Rey, y Susana tiene un secreto (1933), Crisis Mundial (1934) y Rumbo al Cairo (1935), bajo la dirección de Benito Perojo.
En esta época encarnó personajes llanos y castizos, caracterizados con una imagen contrapuesta a la del clásico galán, además de un inolvidable Don Hilarión en la versión cinematográfica de La verbena de la Paloma (1935), papel que interpretó en numerosas ocasiones
Durante la Guerra Civil se trasladó a Alemania, donde rodó El Barbero de Sevilla (1938) y Suspiros de España (1938), junto a la popular actriz Estrellita Castro, y, tras protagonizar varias películas más en Italia, en 1941 volvió a España: fue el inicio de una segunda etapa brillante gracias a su encarnación del personaje de Pepe Conde en la película homónima y en una segunda entrega (El crimen de Pepe Conde, 1946), ambas de José López Rubio, y como protagonista en los filmes de Florián Rey La luna vale un millón (1945), La cigarra (1947) y Cruz de mayo (1954).
Otras películas destacadas en su filmografía fueron Sucedió en Damasco (1942), La mies es mucha (1948) y La reina mora (1954). Estuvo casado con la actriz chilena Blanquita Pozas y tuvieron un hijo adoptivo, Luis Ligero, que les dirigió a ambos en Sobresaliente (1948) y Entre barracas (1949), películas que, sin embargo, resultaron poco afortunadas. Su carrera fue declinando a medida que pasaban los años, sin embargo todavía participó en sendos remakes de sus dos mayores éxitos, La verbena de la Paloma (1963) dirigida por Sáenz de Heredia y Nobleza baturra (1965) de Juan de Orduña. Se retiró poco antes de su muerte