Historiador de arte francés. Hijo de un ingeniero de minas, cursó sus estudios en el liceo de Saint-Étienne, y en 1883 entró en la Escuela Normal. Pasó la prueba de aptitud con el número uno y sucesivamente fue profesor en Saint-Étienne, Toulouse y por fin en París a partir de 1893.
Una breve estancia en Florencia le reveló su vocación de erudito e historiador de arte cristiano, que dio lugar en 1899 a su tesis de doctorado L´Art religieux du XIIIe siècle en France, un estudio sobre la iconografía de la Edad Media y sus fuentes de inspiración, obra seguida en 1908 por L´Art religieux de la fin du Moyen Age en France, texto en el que el autor profundiza el alcance espiritual y la significación dogmática del arte cristiano.
Profesor en la Sorbona desde 1906, es elegido miembro de la Academia de Inscripciones en 1918. Fruto de su estudio de los orígenes del románico a la luz de la arqueología oriental, publica en 1922 L´Art religieux du XIIe siècle en France, antes de trasladarse a Roma, donde es nombrado director de la Escuela francesa. En 1927 entra en la Academia, y en 1932 aparece su obra L´Art religieux après le Concile de Trente, en la que matiza sus juicios sobre las relaciones entre la belleza formal y el espíritu creador.
En 1937 regresa a Francia y publicará todavía, aparte Rome et ses vieilles églises (1942), un estudio sobre La fin du paganisme en Gaule et les plus anciennes basiliques chrétiennes (1950), introducción a una Histoire de l´art carolingien que su muerte dejará inacabada. Su obra, en la que supo unir el rigor científico a la agilidad del estilo, renovó en forma exhaustiva los datos de un problema esencial en la evolución del arte occidental
(París, 1638-id., 1715) Filósofo y teólogo francés. Estudió filosofía y teología en La Sorbona y en 1664 fue ordenado sacerdote. En 1699 fue nombrado miembro honorario de la Academia de las Ciencias, así como del célebre Oratorium Iesu, fundado por Bérulle en París. Malebranche pretendió la síntesis del cartesianismo y el agustinismo, que resolvió en una doctrina personal, el «ocasionalismo», según la cual Dios constituiría la única causa verdadera, siendo todas las demás «causas ocasionales». Por ello, el conocimiento no se debería a la interacción con los objetos, sino que las cosas serían «vistas en Dios». No habría idea clara y distinta del alma, ni tampoco de Dios. Las obras más importantes de Malebranche son De la recherche de la vérité (1674-1675), obra que fue ampliamente aumentada ante las numerosas críticas de sus coetáneos, y sus Méditations chrétiennes et métaphysiques (1683)