Narrador y poeta estadounidense. Fue uno de los máximos exponentes de la Harlem Rennaissance, y se hizo famoso con la publicación de las poesías de Harlem Shadows (1922), junto con otras dos obras posteriores que, sin embargo, parecen actualmente demasiado marcadas por un tono declamatorio.
Su contribución más original a la cultura afroamericana del período de entreguerras son sus tres novelas, aunque artísticamente no fueran totalmente conseguidas: Home to Harlem (1928), donde muestra las dos almas del autor a través de los personajes de Jack, epítome del negro sensual, amante de los placeres de la vida, y de Ray, intelectual constantemente inquieto. Este último personaje vuelve a aparecer en Banjo (Banjo, 1929), novela ambientada en el puerto de Marsella, donde se une en su resentimiento con un músico cuyo estilo de vida es una verdadera rebelión contra la civilización occidental, basada en los impulsos primarios de su negritud.
Banana Bottom (1933), la más serena, es quizá la mejor de las tres, y refleja el retorno del autor a sus raíces jamaicanas, a través del conflicto entre una muchacha ligada a los valores de su cultura autóctona y la rigidez protestante encarnada por un pareja de misioneros.
En su exaltación del primitivismo, de la espontánea belleza impregnada de música y color de la vida del negro no burgués, el autor se hizo portavoz de las tendencias intelectuales presentes también en las vanguardias europeas de la década de 1920, y propugnó durante toda su vida la no integración de la población negra en la sociedad estadounidense
25.º presidente de los Estados Unidos de América (Niles, Ohio, 1843 - Buffalo, Nueva York, 1901). Abogado de Ohio, ligado al Partido Republicano, fue elegido para la Cámara de Representantes en 1876. Se ganó su reputación al impulsar la tarifa aduanera proteccionista conocida como «arancel McKinley» (1890), si bien las consecuencias de ésta para los consumidores le costaron la pérdida del escaño en las elecciones de 1891.
William McKinley
Elegido gobernador de Ohio en 1892, su Administración fue respaldada por una reelección más holgada en 1894. El apoyo del millonario Mark Hanna le facilitó la elección presidencial en 1896 frente al candidato demócrata-popular, William J. Bryan.
Durante su primer mandato (1897-1900) reforzó el proteccionismo aduanero como respuesta a la crisis económica. Ante la Guerra de Independencia de Cuba (1895-98), mantuvo una postura de no intervención hasta que la explosión en La Habana del navío norteamericano Maine le decidió a apoyar la causa de los rebeldes contra la metrópoli española, como venían pidiendo mediante campañas de prensa importantes sectores de la opinión pública norteamericana.
La consiguiente Guerra Hispano-Norteamericana (1898) puso fin a la presencia colonial española en Cuba, Puerto Rico y Filipinas y proporcionó a Estados Unidos la anexión de Puerto Rico, Filipinas y Guam, así como una influencia decisiva en Cuba. Otro problema que tuvo que resolver fue la rebelión de los bóxers contra la penetración extranjera en China, que se saldó con el envío de un cuerpo expedicionario multinacional que tomó Pekín en 1900.
Ese mismo año obtuvo la reelección como presidente, a pesar de las acusaciones demócratas de haber sido instrumento de los grandes intereses empresariales y de un nuevo imperialismo. Murió en un atentado anarquista en la Exposición Panamericana de Buffalo en 1901, sucediéndole su vicepresidente Theodore Roosevelt