Novelista japonés. Tras vivir una adolescencia marcada por la desgracia (quedó huérfano de madre a los catorce años de edad), se volcó en los estudios humanísticos hasta alcanzar una brillante formación intelectual. Sus primeras inquietudes literarias le orientaron hacia el ámbito de la poesía, en el que cultivó los metros breves (haikus) mientras completaba sus estudios superiores en el Departamento de Lengua y Literatura Inglesas de la Universidad de Tokio.
Una vez licenciado, comenzó a ejercer la docencia sin abandonar por ello su vocación literaria. En 1900 consiguió una beca que le permitió desplazarse a Inglaterra, de donde regresó tres años más tarde para hacerse cargo de la cátedra de Literatura Inglesa que, en la Universidad Imperial de Tokio, había dejado vacante el escritor Lafcadio Hearn.
A partir de entonces, su consagración a la creación literaria comenzó a arrojar frutos espléndidos. En 1905 dio a la imprenta su primera novela, Wagahai wa neko de aru (Yo soy un gato), en la que su enorme interés por las relaciones entre el individuo y la sociedad se revestía de sátira para ridiculizar a la clase intelectual del período Meiji. Un año después confirmó la magnífica impresión que había causado esta primera novela con su segunda narración extensa, titulada Botchan (1906), muy celebrada -como la anterior- por la complejidad y elegancia de su prosa
El reconocimiento obtenido tras estas dos publicaciones animó a Sôseki Natsume a abandonar el ejercicio de la docencia para dedicar casi todo su tiempo a la creación literaria, actividad que compaginó con la redacción de numerosos artículos para el periódico Asahi shimbun, en el que colaboró hasta el final de sus días. Poco a poco, su estilo literario fue prescindiendo del preciosismo formal para centrarse en la estudiada caracterización psicológica de los personajes, y en el retrato fluido y fidedigno de determinados grupos sociales.
Así, en la novela Sanshiro (1908) volvió a colocar su lupa crítica sobre la clase intelectual nipona, concentrando ahora toda su atención en los intelectuales desarraigados; mientras que en su siguiente entrega narrativa, Sorekara (Y entonces, 1909), venía a confirmar su desembarco consciente en el difícil subgénero de la novela psicológica, al reflejar con una extraordinaria riqueza de matices el egoísmo extendido en la clase media urbana de su tiempo.
Su vertiginosa carrera literaria se interrumpió en 1910 como consecuencia de una úlcera gástrica que le mantuvo hospitalizado durante un largo período de tiempo. Pero en 1914 regresó a los anaqueles de las librerías con otra obra maestra, Corazón, y dos años más tarde confirmó su recuperación para las Letras japonesas con Luz y tinieblas (1916), novela en la que volvía a darse la mano el lúcido análisis de la sociedad y la aguda caracterización psicológica de sus componentes.
Cuando parecía que estaba llamado a dejar una de las producciones literarias más fecundas y extensas de la literatura japonesa, la muerte sorprendió a Sôseki Natsume sin permitir que llegara a alcanzar el medio siglo de existencia. No obstante, ya por aquel entonces se había convertido en el principal mentor de los jóvenes escritores de su época, en algunos de los cuales (como Ryunosuke Akutagawa) dejó una huella indeleble.
(Imperia, 1903 - Bérgamo, 1979) Químico italiano. En 1963 obtuvo el premio Nobel de Química con Karl Ziegler por sus descubrimientos en el campo de la química y la tecnología de los macropolímeros
Giulio Natta se licenció en Ingeniería química en 1924 por el Instituto Politécnico de Milán, donde impartió posteriormente clases de Química analítica. En 1933 se incorporó a la Universidad de Pavía como catedrático y director del Instituto de Química General. En 1935 se trasladó a la Universidad de Roma como catedrático de Química física. Entre 1936 y 1938 fue catedrático y director del Instituto de Química Industrial del Politécnico de Turín y a partir de 1938 director del Departamento de Química Industrial en el Politécnico de Milán
Al principio de su carrera estudió los sólidos mediante difracción de rayos X y de electrones, técnicas que luego empleó para el estudio de los catalizadores y la estructura de macropolímeros orgánicos. Su investigación sobre la cinética de la reacción de síntesis del metanol, la hidrogenación selectiva de compuestos orgánicos insaturados y la oxosíntesis le permitieron conocer el mecanismo de estas reacciones y mejorar la selectividad de los catalizadores.
En 1938 comenzó a estudiar la producción de goma sintética y fue el primero en lograr separar el butadieno del but-1-eno, mediante un nuevo método de destilación extractiva. También investigó desde los años 30 la polimerización de olefinas. En 1953, con la ayuda financiera de la compañía Montecatini, extendió la catálisis organometálica de Ziegler a las reacciones de polimerización estereoselectiva descubriendo nuevas clases de polímeros.
Estos trabajos condujeron a la obtención de un material termoplástico, el polipropileno isotáctico, que fue preparado industrialmente por primera vez en 1957 en la planta de Montecatini en Ferrara. Este producto ha sido comercializado con gran éxito como material plástico (Moplen), fibra sintética (Meraklon), monofilamento (Merakrin) y película de empaquetamiento (Moplefan). Mediante la técnica de difracción de rayos X pudo determinar la estructura de las cadenas polímeras en los nuevos polímeros cristalinos que descubrió
Otro aspecto muy importante de su investigación posterior fue la síntesis de nuevos elastómeros mediante dos vías diferentes: 1) polimerización de butadieno en polímeros cis-1,4 con un alto grado de pureza estérica, y 2) copolimerización de etileno con ?-olefinas (propileno). Así se obtienen materiales muy interesantes como el caucho sintético saturado. La vulcanización de este caucho se pudo hacer empleando los métodos habituales para el caucho natural, introduciendo unidades monoméricas insaturadas.
Los procesos de síntesis asimétrica que permiten la obtención de macromoléculas ópticamente activas a partir de monómeros ópticamente inactivos tiene una gran importancia científica por su semejanza a los procesos biológicos naturales. Por último destacar la copolimerización de distintas parejas de monómeros para obtener otros copolímeros cristalinos y la síntesis de varios polímeros ordenados estéricamente a partir de monómeros que no eran hidrocarburos
Sus trabajos han sido difundidos a través de cientos de publicaciones, pero su trabajo técnico y científico también ha quedado reflejado en innumerables patentes. Fue miembro de varias sociedades químicas de distintos países y miembro honorífico de varias academias. También recibió títulos honoríficos de distintas universidades.