Político haitiano. Tras organizar diversas rebeliones, fue presidente de la República (1898-1908). Derrocado, se refugió en Jamaica
(Max Simon Südfeld; Budapest, 1849 - París, 1923) Escritor húngaro de origen hebreo. Hijo de un rabino, se licenció en Medicina; pero ya a los catorce años había comenzado a escribir en diarios de Budapest y a continuación colaboró en muchos de los grandes órganos de prensa europeos americanos. Su más fecundo período literario se inicia en 1880, cuando se traslada a París; su producción comprende ensayos críticos, estudios de sociología y filosofía, narraciones, novelas, comedias y hasta fábulas para niños.
Pero las obras a las que está principalmente vinculada su celebridad son tres: Las mentiras convencionales de nuestra civilización (1883), Paradojas (1885) y Degeneración (1893), en las que lleva a cabo un violento y elocuente ataque contra las costumbres y las instituciones de la época, combinando un radicalismo crítico muy especial con la fe en los principios del positivismo. Gracias a su estilo brillante y a su facilidad como divulgador, estas obras obtuvieron gran eco.
Muy apartado del hebraísmo, volvió a él bajo la influencia y a través del mismo proceso que Teodoro Herzl, fundador del sionismo "político", del que fue lugarteniente incansable, consejero escuchado y autorizado portavoz. Después de la desaparición de Herzl y la preponderancia en el seno de la organización del sionismo "práctico" de Weizmann, se mantuvo aparte. La guerra de 1914-18 le obligó, al haber continuado siendo ciudadano austriaco, a refugiarse en España, donde vivió en la soledad y alejado de la familia durante más de cinco años, y publicó en Barcelona una Historia de la pintura española. En 1920, tras una breve estancia en Londres, volvió a París, donde murió, amargado por las desventuras y las desilusiones