Abogado y político liberal que alcanzó la jefatura del Gobierno en 1843. Durante el Trienio Liberal (1820-1823) participó en numerosos círculos constitucionalistas, comenzó a ejercer como abogado, perteneció a la Milicia Nacional y, como miembro de ésta, acompañó en 1823 a las Cortes en los desplazamientos a Sevilla (abril) y Cádiz (septiembre), en su huida de las tropas invasoras conocidas como los Cien Mil Hijos de San Luis.
Salustiano Olózaga
Restaurado ese mismo año el rey Fernando VII en el absolutismo, hubo de pasar a la clandestinidad, en la que se mantuvo hasta 1831, cuando se exilió a Francia. Dos años más tarde, poco antes del fallecimiento del Rey, regresó a España al beneficiarse de la amnistía concedida por la reina gobernadora María Cristina de Borbón, esposa de éste.
Miembro del Partido Progresista, en 1835 fue nombrado jefe político (gobernador civil) de Madrid por el presidente del gobierno Juan Álvarez Mendizábal, cargo en el que permaneció hasta la sustitución de éste un año más tarde. Elegido diputado en febrero de 1836 y en septiembre del mismo año (en los comicios para las Cortes Constituyentes), participó en la elaboración de la Constitución de 1837. En 1840, fue enviado como embajador a París
En abril de 1843 resultó elegido presidente del Congreso de los Diputados y, el 20 de noviembre siguiente, finalizada la regencia de Espartero, en cuya caída tuvo mucho que ver, se le nombró presidente de gobierno. En ese cargo duró sólo unos días (hasta el 5 de diciembre), ya que se le acusó de coaccionar a la reina Isabel II (quien, con 13 años, acababa de ser declarada mayor de edad) para disolver las Cortes y convocar nuevas elecciones.
Conspirador nato, estuvo detenido y desterrado en varias ocasiones durante el predominio del Partido Moderado, pero, en 1854, tras el triunfo de la Vicalvarada, volvió a desempeñar el cargo de embajador en París. Representó desde 1849 la pureza del progresismo, en contra de la escisión democrática que pretendía radicalizar el sistema político, lo que no le impidió buscar soluciones revolucionarias que derrocaran a Isabel II.
Después de la revolución de 1868, que destrono a ésta y en cuya preparación había participado desde su exilio parisino, volvió a ser elegido diputado en enero del año siguiente y presidió la comisión encargada de redactar la Constitución de 1869, eje legal del Sexenio Democrático hasta la instauración de la I República
(1899-1986) Pintor sueco que perteneció al llamado "grupo de Halmstad" (Halmstadgruppe), tendencia pictórica sueca próxima a los surrealistas franceses agrupados en torno a André Bretón.
Al igual que muchos de sus contemporáneos, la formación artística de Axel Olson fue heterogénea y se nutrió tanto de la tradicional enseñanza académica como de la imprescindible conexión con los centros de influencia artística del primer tercio del siglo XX, París y Berlín. Nacido en el seno de una familia que apreciaba las manifestaciones artísticas, Olson inició sus estudios de Arte en compañía de su hermano, el también pintor Erik Olson (1901-1986).
Su escasa diferencia de edad, su formación académica similar y la coincidencia de sus propuestas artísticas unió de forma su decisiva sus vidas. Hasta la constitución en 1929 del "Grupo de Halmstad", Axel Olson pasó por la escuela de Arte de Alexander Archipenko (1887-1964), escultor constructivista ruso que se había establecido en Berlín.
Posteriormente, Olson entró como discípulo en el taller de Georg Adrian Nilsson (1871-1949) conocido como GAN. De su paso por su taller quedó en Olson la impronta de un gusto por la abstracción geométrica, deudora del cubo-futurismo practicado por GAN.
Hamn (1939)
Tras su traslado en 1930 a Halmstad en compañía de su hermano Erik y de los artistas Sven Jonson, Esaías Thoren, Stellan Mörner y Waldemar Lorentzon, la obra de Olson se decantó hacia el surrealismo que caracterizó al grupo, si bien destaca su obra de la de sus compañeros por una mayor ligereza en el trazo de las formas que recuerdan las abstracciones líricas de Kandinsky. En Klippans födelse (1934, Museo de Halmstad), Olson construye una escena de fuerte contenido onírico y metafórico yuxtaponiendo una desvaída figura femenina sobre un fondo plano poblado por sombras estilizadas y construcciones orgánicas.
Obras posteriores de Olson como Retrato de mi hermano Erik (1938) o Korgstonlen (1940, ambas en colección privada, Sverige) presentan una faceta más al gusto tradicional surrealista en su producción; en la primera composición, evocadora de la obra pictórica de su hermano, se aprecia la influencia de Salvador Dalí; la segunda es una representación de una butaca sobre un paisaje espectral que el artista nutre con la rica iconografía surrealista de fuerte poder evocador