Músico paraguayo. Su infancia transcurrió en Formosa (Argentina), donde trabajó duramente, pero pronto mostró sus inclinaciones artísticas. Desde 1937 formó parte de varios grupos musicales (General Santos, Ocara Poty y Manduá Rory) hasta que con Ignacio Melgarejo formó el Trío Asunceno, con el que recorrió todo el país y parte del Brasil hasta 1946.
Al año siguiente, cuando estalló la guerra civil, se trasladó a Argentina con Ignacio Melgarejo y Herminio Giménez, donde se incorporó al conjunto de Félix Pérez Cardozo hasta 1950, además de ejercer como profesor de música. En el Teatro Apolo de Buenos Aires exhibió su única obra teatral, Anivena Karaíkuera, en 1956. Algunas de sus obras principales son “Recuerdos de Ypacaraí”, “Mis noches sin ti”, “Que será de ti”, “Yo te quiero mucho”, “Techagaú” o “Añoro”, “Te extraño” y “Tus lágrimas”. En Asunción se abrió un museo que lleva su nombre
(Toledo, hacia 1510 - Nápoles - hacia 1570) Compositor y organista español. Ortiz es conocido especialmente por su tratado sobre el arte de la variación instrumental titulado Tratado de glosas sobre cláusulas y otros géneros de puntos en la música de violones nuevamente puestos en luz, y dedicado al noble Pedro de Urríes, Barón de Riesi (Sicilia). La obra fue publicada en Roma en 1553 en español y en italiano.
Está dividida en dos libros: en el primero se dan normas sobre cómo improvisar y realizar ornamentaciones y variaciones; y en el segundo se incluye una serie de piezas para viola da gamba llamadas recercadas, algunas de ellas basadas en melodías de otros autores como Arcadelt (O felici occhi miei) o Pierre Sandrin (Douce mémoire). El Tratado de glosas de Diego Ortiz es el primer manual impreso dedicado a la interpretación con instrumentos de arco, y en él Ortiz muestra numerosos ejemplos de adornos instrumentales practicados en la época que podían ser incluidos en diversos pasajes de obras musicales
Entre 1557 y 1570, Ortiz fue maestro de capilla de Fernando Álvarez de Toledo, tercer Duque de Alba y virrey de España en la corte de Nápoles, cuyo sucesor fue Pedro Afán de Rivera. A este último dedicó Ortiz su Musices liber primus, editado en 1565 y que contiene himnos, salmos y salves basados en el canto llano y adaptados para varias voces.
Ortiz seguía la costumbre española de acompañar la polifonía sacra con instrumentos, a diferencia de la tendencia que se practicaba en otros países europeos. Su estilo era conservador, con claras influencias del polifonista sevillano Cristóbal de Morales. Algunos de sus motetes se han conservado transcritos para vihuela en el libro Silva de sirenas de E. de Valderrábano (1547)