Director de cine nacido en Ouagadougou en 1954. Ingresó en el Instituto de Estudios Cinematográficos Africanos, en su ciudad natal, para más tarde trasladarse al prestigioso IDHEC de París con intención de profundizar en los conocimientos técnicos adquiridos.
Idrissa Ouedraogo
En Francia realizó infinidad de documentales para la televisión a comienzos de los ochenta, que le sirvieron como banco de pruebas en el que pulir su característico estilo visual donde se combina el penetrante análisis psicológico de los individuos con el apasionamiento por mostrar las bellezas paisajísticas de su tierra mediante planos de larga duración y un registro sonoro naturalista.
Aunque le encanta experimentar con los diversos géneros y formas narrativas, el motivo central de sus largometrajes suele ser el concepto de viaje, bien sea físico (del pueblo a la ciudad, como en Samba Traore o en Kini & Adams), bien sea metafórico (la odisea interna de unos africanos a través de la tradición y la cultura que se refleja en Tilai).
Fotograma de Tilai
La estética preciosista que rezuman sus filmes, así como la visión nostálgica y exótica con la que se muestra África, han convertido su cine en objeto de encendida polémica entre los puristas que califican la mirada de Ouedraogo de ´europea´ y los que defienden el interés de que se haga el tránsito de una cinematografía miserabilista a otra en la que se busca la máxima perfección en imagen y sonido
Esto último, precisamente, ha sido una de las causas por las que estas películas concursan en los más importantes festivales internacionales con extraordinario éxito y son pronto convertidas en auténticas obras de culto. Así Yaaba (una historia de amistad entre un joven y una anciana) y Tilai obtuvieron respectivamente el Premio de la Crítica y el Gran Premio del Jurado en las ediciones de 1989 y 1990 del Festival de Cannes. Samba Traore alcanzó el Oso de Plata en el de Berlín en 1992; y Le Cri de Couer concursó en el de Venecia en 1994.
Kini & Adams, donde Ouedraogo rodó por primera vez en inglés para dar un definitivo salto a los mercados internacionales, y que fue presentada en 1997 al Festival de Cannes, supone un pequeño giro estilístico en su carrera, por más que los temas (el viaje, la dificultad de mantener los lazos de amistad ante los cambios vitales) permanezcan invariables
Poeta canadiense en lengua francesa, nacido en Montreal en 1930. Está considerado como uno de los escritores más destacados de la década de los sesenta en Quebec. Estudió en el Collège Séraphique des Capucins en Otawa y en la Universidad de Montreal, donde obtuvo en 1952 la Licence en Ciencias Sociales.
Fernand Ouellette
En 1959 fundó junto a Jean-Guy Pilon y otros jóvenes poetas la publicación literaria titulada Liberté. Entre 1956 y 1970 escribió textos para Radio-Canada y artículos sobre poesía, sobre la situación político-social en Quebec, sobre cuestiones de lenguaje y cultura y sobre artistas europeos como Edgard Varèse, Novalis, Jouve, Kierkegaard y Dostoievsky. Algunos de estos artículos fueron publicados juntos en Les actes retrouvés (1970). En 1972 fundó junto con Jean-Guy Pilon y André Beleau uno de los actos culturales más importantes de Quebec: el Recontre Internationale Québécoise des Écrivains.
En 1972 L´Hexagone publicó Poésie, que contiene sus primeras cuatro colecciones poéticas: Ces anges de sang, Séquences de l´aile (1958), Le soleil sous la mort (1965) y Dans le sombre (1967); además, incluye una importante declaración sobre su concepción de la poesía titulada "Le Poème et le poétique". Este volumen fue galardonado con el premio France-Canada.
Nueve años después, vio la luz un segundo libro titulado En la nuit, la mer, el cual contiene dos colecciones: Ici, ailleurs la lumière (1977) y A découvert (1979). Los temas predominantes de su obra son la vida y la muerte, el amor y la sensualidad, la búsqueda espiritual y la soledad. Además, es autor de Écrire en notre temps (1979), una colección de ensayos que contiene reflexiones sobre la naturaleza de la poesía y su lenguaje; y de las novelas Tu regardais intensément Geneviève (1978) y La mort vive (1980)