Político y militar tailandés. Ministro de Defensa en 1934 y jefe de un gobierno dictatorial en 1938, su pretensión de anexionarse las provincias orientales de Camboya le llevó a aliarse con los japoneses durante la II Guerra Mundial y a convertir su país en una gigantesca base japonesa. Detenido al término de la guerra, fue puesto en libertad al poco tiempo. En 1947 un golpe militar le llevó de nuevo al poder. Depuesto en 1957, se exilió a Tokyo
(París, 1879-id., 1953) Pintor francés de origen hispanocubano. Comenzó su carrera artística en el ámbito del impresionismo y el fauvismo, con obras fáciles que le proporcionaron un gran éxito comercial. Pero su temperamento inquieto y subversivo le llevó a buscar caminos más comprometidos, por lo que entró en la órbita del cubismo con obras caracterizadas por la incorporación de elementos simbólicos y de títulos y frases sin ninguna relación con el tema.
Sus contactos con Marcel Duchamp en Nueva York, donde estuvo en varias ocasiones durante la década de 1910, y con el grupo dadaísta de Zurich, lo llevaron a decantarse por el dadaísmo como tendencia artística preferida. A este período corresponde su estilo más característico, llamado maquinista por centrarse en la representación de máquinas, que en ocasiones son símbolos de los seres humanos y a veces hacen referencia al mito del maquinismo, del desarrollo industrial a ultranza.
Pero quizá, más que a la creación artística, la influencia de Picabia en las generaciones posteriores se deba a la tarea intelectual, de provocación cultural, que llevó a cabo desde las revistas 391, fundada por él en Barcelona en 1917, y 491, fundada en París en colaboración con Breton. A partir de 1919, frecuentó en París el grupo surrealista, y en 1924 realizó la memorable escenografía para la película Entr´acte, de René Clair.
En 1925 se estableció en la Costa Azul, donde desarrolló un nuevo estilo pictórico que se ha definido como de los monstruos y las transparencias, y más tarde volvió de nuevo al surrealismo. Su pintura es, por ello, muy variada, con constantes cambios de temática y estilo, aunque dentro, casi siempre, del mundo de lo imaginario y lo simbólico. Las ideas que pregonó desde sus publicaciones contribuyeron a la difusión de las vanguardias