Político y escritor catalán. Pertenecía a una antigua familia de propietarios rurales del Vallés oriental. Cursó la carrera de abogado en la Universidad de Barcelona y, todavía estudiante, presidió el "Centre Escolar Catalanista" y compuso, en colaboración con Pere Muntanyola, el folleto Doctrina catalanista.
Publicó sus primeros artículos en La Reinaxença: muy joven aún ingresó en la "Unió Catalanista", pero se separó de este partido para dirigir La Veu de Catalunya, al convertirse este semanario en diario (1899). Pronto conquistó un gran prestigio como periodista de criterio lúcido y juicioso. Expuso su doctrina política en La nacionalitat catalana y en un manifiesto, Per Catalunya i l´Espanya Gran, que firmaron los parlamentarios catalanes.
Procesado en 1897 por un articulo en La Renaixença y encarcelado en 1902 por otro en La Veu de Catalunya, del cual no era autor, su salud, ya precaria, se hizo más delicada y le privó de intervenir plenamente en las luchas políticas. A partir de la Solidaridad Catalana (1906) Prat de la Riba se convirtió en el verdadero director de la "Lliga Regionalista", partido que ocupaba el centro de la política catalana.
Diputado provincial (1905), presidente de la Diputación (1907), pasó a presidir la Mancomunidad de las cuatro, provincias catalanas al crearse esta institución (1914). Con ambición plenamente nacional, se consagró a dar contenido a la vida catalana, creando e impulsando entidades de cultura como la Universidad Industrial, el Instituto de Estudios Catalanes, la Biblioteca de Cataluña, el Consejo de Pedagogía, etc. Su autoridad era indiscutible, no sólo entre los parlamentarlos de su partido, sino entre los otros grupos políticos; todos veían en él al "seny ordenador" de un vasto y auténtico renacimiento cultural y político.
Mortalmente enfermo, preparó la convocación de la Asamblea de Parlamentarios (1917) ante la negativa de Eduardo Dato, presidente del Gobierno español, a abrir el Parlamento. Trasladado a su casa solariega de Castellterçol (Vallés oriental) allí murió serenamente el 1.º de agosto de 1917. Además de las obras citadas se le deben La nació com a subjecte de Dret natural, Missatge en defensa dels drets de la llengua catalana, Història de la nació catalana, Les Mancomunitats, Durán y Bas, estudio biográfico en castellano; La actividad provincial y Los jurados mixtos para dirimir las diferencias entre patronos y obreros
(Florencia, 1913 - Roma, 1991) Escritor italiano que se inició en el neorrealismo para luego evolucionar hacia una descripción global de la sociedad de su país encuadrada siempre en un concreto clima históricosocial. De humildes orígenes, vivió la infancia y parte de la juventud en un barrio popular de su ciudad natal, ambiente que más tarde retrató en muchas de sus obras. Pronto se independizó y, mientras se dedicaba de manera autodidacta al estudio y la lectura, desempeñó numerosos y distintos oficios.
Entre 1935 y 1936 fue internado en dos sanatorios, pero cuando se recuperó se introdujo en los ambientes literarios florentinos, donde conoció a E. Vittorini, gracias al cual empezó a colaborar en revistas como Letteratura y Campo di Marte. Sus primeros libros, Tappeto Verde (1941) y Via dei Magazzini (1942), son narraciones memorialísticas, ambientadas en las barrios humildes de Florencia, que pretenden convertirse en la crónica de una determinada condición social y humana.
Sin embargo, fue El barrio (1944), historia de un grupo de jóvenes obreros que se enfrentan a difíciles decisiones sobre su futuro, el libro que representó un primer momento importante en su carrera como escritor. Las experiencias de su activa participación en la Resistencia le decidieron a ampliar el mundo de sus personajes introduciendo una dimensión histórica y política en Oficio de vagabundo y Crónica de pobres amantes (ambos títulos de 1947) y Un héroe de nuestro tiempo (1950), turbia historia de la posguerra. En estos libros, así como en Crónica familiar (1948), que se basa en el recuerdo del hermano muerto, supo conciliar con acierto su compromiso social y político con su vena sentimental y poética
Con Metello (1955), primera parte de la trilogía titulada Una historia italiana, se propuso plasmar la vida florentina e italiana del período que va de 1875 a 1945. El libro desató una encendida polémica, ya que algunos críticos lo elogiaron como la novela que marcaba el paso del neorrealismo al realismo, mientras que otros lo condenaron por considerar que lo sentimental y lo personal disipaban la narración de las luchas obreras. Incluso hubo quien vio traicionada la vena lírica del escritor a causa de su compromiso político.
La trilogía se completó con El embrollo (1960) y Alegoría y escarnio (1966). Entre estos dos últimos escribió Constancia de la razón (1963), novela en la que reaparecen los temas de la memoria, de la adolescencia y de la educación moral. Por toda su actividad como narrador recibió en 1957 el premio nacional Feltrinelli de la Accademia dei Lincei