Empresario y periodista alemán. Nacido en el seno de una familia judía, adquirió la nacionalidad británica y se convirtió al cristianismo en 1844, fecha a partir de la cual adoptó el apellido Reuter. Instalado en Berlín, su actividad periodística y panfletaria le atrajo la hostilidad de las autoridades, y en 1848 emigró a París. En 1851 se trasladó a Londres, donde fundó una agencia de telégrafos, que en un principio funcionó sobre todo gracias a los telegramas comerciales. Sin embargo, Reuter aprovechó el florecimiento de la prensa para lanzar una suscripción específica para periódicos que no tardó en captar grandes clientes. Su primer gran éxito tuvo lugar en 1859 al transmitir a Londres el discurso pronunciado por Napoleón III con ocasión de la guerra franco-austriaca del Piamonte, en Italia. La utilización de cables submarinos le permitió extender su servicio a otros continentes y consolidar su imperio periodístico
(Estocolmo, 1934) Artista y poeta sueco. Durante los años cincuenta creó, en la línea de la tradición dadaísta-surrealista, poemas, dibujos, pinturas en plexiglás, «papeles pintados» de palabras e imágenes. En los años sesenta realizó happenings y acciones, que denotan la influencia de Fluxus. Intentó desmitificar el arte con sus experimentos a partir del láser y la holografía (Kilroy, 1962-1972)