Primer rey de Israel. Según la tradición, Saúl se convirtió en rey tras ser ungido por Samuel, quien accedía de este modo a los ruegos de su pueblo, que quería un jefe guerrero para enfrentarse a los filisteos y los amalecitas. Otras fuentes inducen a pensar que, de hecho, Saúl fue un labrador de la tribu de Benjamín que, tras organizar un pequeño ejército, liberó a la ciudad de Yabés de Galaad del asedio filisteo, hecho tras el cual se autoproclamó rey. Una vez reunidas las tribus de la región central, Saúl creó una pequeña corte en Guibeá, mantuvo un ejército permanente e intentó estrechar lazos con Judá. Estos amagos de poder personal no fueron del agrado de la jerarquía religiosa, que veía cómo el rey no se mostraba dócil a su influencia e intentaba usurpar algunas de sus funciones, como la ofrenda de sacrificios, por lo cual Samuel buscó a otro para proponerlo como monarca: David. Acosado por unos reorganizados filisteos, Saúl pereció junto a su hijo Jonatán en la batalla de Gelboé
(Huesca, 1930 - Cuenca, 1998) Pintor español. Comenzó a pintar en 1947, durante una larga enfermedad. Sus primeros años de actividad artística se desarrollaron en Madrid; a partir de 1953, residió largas temporadas en París. Viajó por Europa y América, pero nunca dejó de estar en contacto con España
Antonio Saura inició su carrera pictórica dentro de la tendencia surrealista. Sus primeras obras (elaboradas en el lecho) son pequeñas y primorosas de ejecución; su producción se desarrollaba dentro de un mundo soñado y finamente colorista, de ejecución trabajada como una joya, con minuciosa pincelada y bien fundidos empastes de color. Esa primera etapa dio paso a otra mucho más libre pero siempre fantástica y surreal, de la cual pueden ser ejemplo obras como El Cementerio de los Suicidas. Lo abstracto aparece cada vez con más intensidad y las cosas se transforman en vagas formas o en ambivalencias bien acusadas, como en Piedra, Luna, Cielo.
Hacia 1950 desembocará, con el abandono de la figuración, en la creación de una pintura de mancha y de gesto en la que la representación desaparece. En 1957 fue uno de los fundadores del grupo El Paso, que ejerció una gran influencia en la pintura española de las décadas de 1950 y 1960. La actitud de Saura en este momento crea una evidente tensión y plantea una vigorosa transformación en el arte español del momento, y llega así el triunfo definitivo de lo informal en la pintura española. Pero pronto Saura va a volver a una desgarrada y dramática figuración, bien triturada y deformada, en la que aparecen gestos y manchas de monstruos y carátulas, con los que apunta hacia un mundo expresivo, no ajeno a la sátira histórica y social, como él mismo apoyará en sus escritos