Escritor japonés. En sus obras se interroga acerca del sentido de la existencia, Shin´ya no Shin´en (El banquete nocturno, 1947), cuestión que proviene de las influencias recibidas a través de las lecturas de Kierkegaard y Nietzsche, además de Dostoievski. En 1951 se convirtió al cristianismo y sus intereses derivaron, entonces, hacia las relaciones entre el protestantismo y la cultura japonesa
(Hiroshima, 1912) Director y guionista de cine japonés. Reputado director artístico a finales de los treinta, Shindo pasó a desempeñar labores de guionista cinematográfico durante la Segunda Guerra Mundial. Colaboró en el desarrollo de varios proyectos finalmente firmados por cineastas de la talla de Kimisaburo Yoshimura, Kenji Mizoguchi y Kon Ichikawa. En 1950 creó una compañía de producción en la cual eran socios Yoshimura y actriz Nobuko Otawa, protagonista de varios filmes de Shindo
Tras debutar con el melodrama Historia de la esposa amada (1951), se dio a conocer internacionalmente con Los hijos de Hiroshima (1952), una profunda reflexión acerca del horror atómico. En este filme quedaba reflejada la lucha por la superación de la sociedad nipona en el periodo de postguerra, durante el cual el deseo de afrontar un nuevo futuro prevaleció sobre la memoria de la derrota. Su siguiente éxito fue La isla desnuda (1961), una producción semidocumental, sin apenas diálogos, que retrataba con singular belleza la existencia de un grupo de personajes en una aislada población costera
En Kuroneko (1968), Shindo relataba una historia de amor y condenación protagonizada por una madre y su hija, violadas y asesinadas brutalmente, pero vueltas a la vida en forma de espectros vengadores. Los dos fantasmas femeninos, Oshige (Nobuko Otowa) y Yone (Kiwako Taichi), quedaban así condenados a beber la sangre de todos los samurais que se cruzaran en su camino. Tras el éxito de Kuroneko, el cineasta continuó trabajando en el cine japonés, pero sus posteriores títulos ya no tuvieron repercusión internacional