Filósofo inglés, la más destacada figura del evolucionismo filosófico. Fue el primogénito y el único superviviente de los seis hijos de William George y Harriet Holms. De salud precaria, poseyó, en cambio, una mente lúcida, una voluntad tenaz y un espíritu intolerable en cuanto a autoridad y dogmas. Recibió la formación de su padre y su tío -ambos maestros-, y, en particular, de sus experiencias y lecturas personales. Cuando joven, no quiso frecuentar la Universidad, y ya anciano y famoso, rechazó siempre los numerosos honores y nombramientos que las instituciones docentes y académicas intentaron ofrecerle.
Situado entre el metodismo de su madre y las simpatías de su padre hacia los cuáqueros, se manifestó independiente; y así, permaneció ajeno a vínculos políticos y profesionales, y ni tan sólo quiso doblegarse al del matrimonio. Llegó incluso a considerar la cultura como posible limitación de la libertad; a causa de ello no leyó mucho, ni aun textos filosóficos (no parece haber conocido muy profundamente a Kant). No por esto era misántropo, antes al contrario: amó la conversación, frecuentó las tertulias y el teatro y tuvo muchos amigos, entre los cuales figuraron Mill, Huxley, Tyndall y George Eliot.
(Cookham-on-Thames, 1891-Londres, 1959) Pintor británico. Su pintura, salvo en paisajes y retratos realistas, evolucionó hacia un realismo modificado con singulares y expresivas deformaciones, hasta obtener efectos casi místicos. En sus últimas obras tendió a una especie de misticismo pansexual (Doble retrato desnudo)