Emanuel Swedenborg nació en Estocolmo, en el año 1688 y murió en Londres en el año 1772, científico, teólogo y filósofo sueco, nació en Estocolmo y murió en Londres, donde había establecido su residencia. Hijo del profesor y obispo luterano J. Svedberg.
Pocos individuos, en la historia del mundo, realizaron en el curso de una vida tal diversidad de invenciones, descubrimientos, y conocimientos útiles, como los que hizo Emanuel Swedenborg.
Fue encuadernador, hidrógrafo, fisiólogo, astrónomo (fabricando él mismo sus propias lentes, su telescopio y su microscopio), relojero, lingüista (hablaba quince lenguas), biógrafo, poeta, editor, psicólogo, filósofo, matemático, geólogo, metalúrgico, botánico, químico, físico, ingeniero en aeronáutica, dibujante, músico (organista), cristalógrafo, maquinista, carpintero (marquetería), legista, ingeniero de minas, tesorero, cosmólogo, teólogo, y gran viajero.
Hasta la edad de 56 años, Emanuel Swedenborg dedicó esencialmente su vida a la investigación científica que cubre todas las disciplinas mencionadas más arriba, sus investigaciones lo llevaron a numerosos países. Publicó un gran número de libros sobre matemáticas, geología, química, física, mineralogía, astronomía, anatomía, biología, psiquiatría, en los cuales se contiene el germen de numerosas ideas brillantes asignadas más tarde a otros investigadores.
Hizo los planos de un avión, de un submarino, descubrió la función de las glándulas endocrinas, el funcionamiento del cerebro y el cerebelo. Sus obras se utilizan hoy día en los EE.UU. en institutos de investigación en psicomotricidad, probando así clínicamente el fundamento de descubrimientos hechos hace cerca de tres siglos; inventó un sistema decimal monetario que sirve también para el estudio de la cristalografía.
Fue el primero en avanzar la hipótesis de la formación nebulosa del sistema solar, dando la naturaleza de la vía láctea. Produjo también un estudio avanzado sobre la circulación de la sangre y sobre la relación del corazón y los pulmones.
A la edad de 56 años, abandonó sus investigaciones científicas para dedicarse enteramente a la investigación teológica, psicológica y filosófica con el fin de hacer descubrir a los hombres una espiritualidad racional. Murió en 1772 después de haber escrito más de un centenar de obras sobre todos los temas enumerados. Algunas traducidas al castellano.
Pero qué decir de una manera esquemática sobre este hombre fuera de lo común, sino que tuvo un impacto en la evolución del pensamiento intelectual y filosófico en general. Si se observa su vida de más cerca, los estudios que hace, las obras que publica, la gente con quien se entrevista y con la cual comparte sus ideas, resulta rápidamente evidente que ya en vida, influye sobre el mundo "pensante" de su tiempo.
Desde su más tierna infancia, muestra una pasión para el estudio de todo lo que tiene relación con el universo y el hombre, observa los mecanismos, las fuerzas y los influjos que regulan la vida y cómo se desenvuelven.
Mucho antes de la edad de 10 años, se relaciona con el mundo adulto para buscar respuestas en temas como la fe, la vida eterna, la sede del alma, pero descontento por las respuestas que obtiene a sus cuestiones, experimenta sobre sí mismo y por sí mismo. Al experimentar sobre su respiración, se piensa que tendría a partir de la infancia, acceso a estados de consciencia modificada. Más tarde fabricará sus propias lentes ópticas para explorar lo infinitamente grande y lo infinitamente pequeño.
Su búsqueda insaciable de la sede del alma le hizo relacionarse con hombres famosos de su tiempo, tales como Newton, Leibniz y de otros miembros de la Royal Society y las universidades de Oxford y Cambridge. Viaja por toda Europa patrocinado por el rey Carlos XII y el duque de Brunswick, con el fin de estudiar e imprimir los frutos de sus investigaciones.
Si ya en vida influyó en grandes reyes, grandes científicos y filósofos, como Newton, Kant, Voltaire, es después de su muerte, y en consecuencia, al conocimiento que nació sobre las bases de su pensamiento, cuando se notó su influencia en las esferas religiosas masónicas y terapeúticas.
Los escritos de Emanuel Swedenborg inspiraron a grandes músicos, escritores y psicólogos en sus obras. Entre ellos se citará a los más conocidos tales como Goethe, Gérard de Nerval, Balzac, Wagner, Oberlin, Berlioz, Baudelaire, Paul Valéry, Eliphas Lévi, Hahnemann. En lengua castellana su difusor más importante fue Jorge Luis Borges, que escribió varias conferencias sobre el místico sueco. Carl Jung dibujó la inspiración de su "psicología de las profundidades" en los "Misterios Celestiales", que influye por sus estudios en toda la psicología moderna.
Algunos se sirvieron de los escritos de Swedenborg, y le achacan, que solamente tiene como finalidad el espiritismo; mientras que Swedenborg sólo practicaba el espiritismo para convencer, y no sin reticencias, conociendo bien los peligros de tales prácticas. Así, estos grupos lanzaron un descrédito importante sobre Swedenborg y sus escritos, mezclándolo con sus prácticas sectarias.
Placa a la memoria de Emanuel Swedenborg en su casa natal de Estocolmo.
Otros aún se sirvieron de él sin referirlo directamente, pero para crear su propio movimiento religioso, su propia iglesia y utilizando su teología de una manera personal. Entre ellos se podrá citar el cienticismo, la teosofía, la antroposofía.
Actualmente hay numerosas iglesias que citan sus escritos teológicos como la verdad Divina misma y se pueden encontrar esparcidas por las cuatro esquinas del mundo, partiendo de África y Europa, pasando por Asia, donde los budistas le llaman el "Buda del Norte" para ir a EE.UU., en América del Sur, en Canadá, en Rusia, etc.
Decenas de millares de adeptos en el mundo le siguen y a pesar de una apariencia hermética, los escritos teológicos de Swedenborg son simples en su mensaje inicial: "Ama a tu prójimo como a ti mismo, purifícate del mal, trabaja por la armonía universal".
Obras principales
Swedenborg pone de manifiesto en este libro que el cielo y el infierno son Estados en primer lugar de alma para a continuación volver a lugares. Después de la muerte del cuerpo físico el individuo pasa un tiempo intermedio en el mundo de los espíritus de ahí elegirá libremente ir al cielo o al infierno. El cielo no es una recompensa y el infierno no es un castigo. Descripción de una experiencia de paso, ángeles y demonios.
Descripción de la naturaleza celestial de la complementariedad entre marido y mujer. Los esposos forman juntos un "Ángel" y viven eternamente unidos uno al otro después de la muerte en juventud perpetua. Descripción de la naturaleza de este amor.
Descripción de los deseos malsanos que son contrarios a la realización armoniosa del par y que lo matan.
Lectura de la Biblia según el sentido interno incluyendo metódicamente los símbolos. Pequeño diccionario por el que se explica la terminología utilizada por Swedenborg.
Presenta cinco aspectos de la visión de la existencia: la naturaleza de Dios; la naturaleza del mundo espiritual; la naturaleza del hombre; la doctrina de los grados; la creación del universo.
Naturaleza de la relación entre Dios y el ser humano. Descripción de las leyes espirituales que regulan el universo: el Karma, causa de las enfermedades y guerras y el sufrimiento en general, regeneración del individuo.
Exégesis bíblica sobre las naturalezas de: la vida, la escritura Santa, la fe, Jesucristo.
Resumen de las doctrinas y de los elementos de la teología de Swedenborg.
Exégesis del génesis y el éxodo bíblicos, con referencias a todo el antiguo y nuevo testamento según tres premisas:
Índice de los símbolos del cuerpo espiritual en el cuerpo humano, poniendo de manifiesto que cada parte física tiene su contrapartida a nivel sutil del alma, y que existe una relación causa-efecto entre el estado mental y el del cuerpo.
Naturaleza del verdadero amor hacia otros, hacia la sociedad y hacia Dios. Explicación de las diez órdenes.
Última obra de Swedenborg, que se refiere a la naturaleza del cristianismo espiritual. Comparación de los distintos dogmas cristianos con lo que enseña la Biblia en su sentido simbólico. Significado del bautismo, la Santa Cena, Trinidad, el decálogo, la vida eterna, de la salud, de la vuelta del Cristo, del decaimiento de la humanidad y su regeneración, el hombre cósmico.
Su visión
Durante la conferencia que Jorge Luis Borges impartió en la Universidad de Belgrano el 16 de junio de 1978, el escritor relató someramente las visicitudes de la obra y la vida del místico sueco. Así, explica cómo sucedió el cambio de perspectiva que a los 56 años lo arrebató del estudio de la ciencia y lo condujo a la teología y el esoterismo. El cambio de perspectiva supuso un cambio de estilo también, del barroquismo a una árida prosa que buscaba la exactitud de la descripción.
Dichos cambios se deben a una serie de revelaciones en las que Jesucristo se presentó en la casa londinense de Swedenborg para requerir de él una misión: reconducir la religión y la interpretación de las escrituras cristianas. Con los poderes de un Fausto para visitar cielo e infierno, pero evitando el pacto diabólico, Swedenborg recibió permiso para contarle a la humanidad los secretos de la vida después de la muerte.
El encuentro se produjo de la siguiente manera: Swedenborg se hallaba mirando por la ventana cuando vio llegar a un hombre por su calle hacia él llegando a sentir una empatía instantánea. Para su sorpresa, aquel hombre se dirigió a su puerta y llamó. Al abrir, Swedenborg sintió una confianza absoluta, una necesidad de entrega hacia ese individuo, que se presentó a sí mismo como Jesucristo. Tomando agradablemente un té con él, éste le reveló su preocupación por el rumbo de la Iglesia y le anunció que él era el indicado para explicar al mundo el camino correcto.
Borges arguye que muchos místicos pueden pasar por locos, pero el caso de Swedenborg es especial, tanto por su enorme capacidad intelectual, como por el tremendo prestigio científico del que gozaba como por el radical viraje que supuso en su vida y obra. Destaca también como prueba de verosimilitud de estos escritos la sencilla facilidad de su prosa, enfrentada a la tradicional exaltación mística y a su misma prosa anterior, densa y abstrusa, como a la enorme originalidad de sus planteamientos, los cuales han sido fundamentales en la conformación del concepto de cielo moderno.
Familia de músicos neerlandeses.
Jan Pieterszoon (Deventer, 1562-Amsterdam, 1621) fue organista de la iglesia de San Nicolás de Amsterdam desde 1577 hasta su muerte. Su obra para órgano fue determinante para la evolución de la tradición organística que culminó en Buxtehude (24 corales, 19 fantasías, 13 tocatas y 7 series de variaciones sobre lieder profanos). Es autor también de una extensa producción vocal (canciones, motetes, salmos). Fue el último gran exponente de la escuela flamenca.
Dick (Amsterdam, 1591-?, 1652), hijo del anterior, sucedió a su padre como organista de San Nicolás y editó el Libro séptimo de canciones vulgares en el que figuran dos obras suyas a cuatro voces