Poeta alemán. Nacido en el seno de una familia de caballeros de la región de Salzburgo, se cree que participó en la Cruzada de 1228 y que, tras frecuentar las cortes del duque de Austria Federico II, y del duque de Baviera Otón II, llevó una vida de poeta errante en Alemania, componiendo poesías líricas y canciones (Tanzlieder) que marcan el inicio del declive del Minnesang (tradición lírica influenciada por el amor cortés provenzal). Pocos años después de su muerte surgió la leyenda en torno a su figura. Se contaba que después de llevar un vida disoluta y pecadora en Venusberg, había peregrinado a Roma, donde el papa Urbano IV le habría dicho que era tan imposible concederle el perdón como ver reverdecer su bastón de peregrino. Algunas versiones cuentan que, durante su camino de vuelta, su bastón se cubrió de hojas; otras, que se arrepintió y fue a parar a Palestina, donde murió. Su leyenda inspiró a numerosos poetas y músicos alemanes, entre ellos Heine y Wagner, que en 1845 compuso la célebre ópera Tannhäuser
(Venosa, 1510-Teano, 1568) Poeta italiano. En su «canzoniere», adscrito aún a los módulos petrarquistas, fue un precursor del barroco, y su obra ejerció notable influencia sobre la poesía española de los ss. XVI-XVII. Es autor de poemas líricos (Estancias a Bernardino Martirano, Estancias al virrey de Toledo o Clorida, Los dos peregrinos), de un poema didáctico (La hacienda) y de un poema religioso (Las lágrimas de San Pedro), escrito tras la inclusión de su obra en el Índice de libros prohibidos.