Sabio árabe. Dedicado en especial a las matemáticas y la astronomía, reformó el sistema de Tolomeo y tradujo y comentó algunos tratados de Arquímedes, Euclides y Apolonio de Pérgamo. En su obra El libro de los datos estudió cuestiones de geometría elemental y trató de resolver la ecuación de segundo grado por métodos geométricos. Extendió el concepto de número a los reales positivos y elaboró un sistema de formación de los «números amigos». En astronomía, se ocupó en especial del fenómeno de los equinoccios. Médico de gran fama, escribió diversos tratados médicos, entre ellos la antología Tesoro de la medicina
(Calcuta, India, 1811-Londres, 1863) Escritor británico. Nacido en el seno de una familia de funcionarios angloindios, a los dieciséis años se trasladó al Reino Unido para estudiar derecho en Cambridge. Viajó al continente como corresponsal de varios periódicos, y residió a partir de 1834 en París, donde contrajo matrimonio con Isabelle Shawe. Allí se aficionó también al dibujo y la pintura y dilapidó su fortuna, por lo que se vio obligado a ganarse la vida como caricaturista y periodista, a su regreso a Londres.
En su primera novela, Barry Lyndon (1844), de influencia dickensiana, recrea paródicamente alguna de las características de la existencia romántica. Tras colaborar en diversas revistas, apareció El libro de los esnobs (1846-1847), integrado por una serie de ensayos en los que caricaturiza, escrita y gráficamente, la hipocresía de la sociedad británica.
En 1848 publicó la novela sin héroe La feria de las vanidades, en la cual abandona la atmósfera de Dickens para adoptar un patrón de corte más realista. En esta misma línea, escribió La historia de Pendennis (1848-1850) y Memorias de Enrique Edmond (1852), obra en la que presenta un análisis irónico de la realidad de la pequeña nobleza. En Los newcomes (1853-1855) y Los virginianos (1857-1859) extiende a la época victoriana el género picaresco.
Sus últimas obras literarias, El viudo Lovel (1860) y Las aventuras de Philip (1861-1862), confirman esta aguda visión de la realidad capaz de descubrir toda su ironía y comicidad. La vanidad e hipocresía de la sociedad victoriana son el objeto de la sátira constante de Thackeray, lo que le convirtió en un escritor polémico en su tiempo