Poeta trágico griego. Según la tradición ateniense, fue el creador de la tragedia al introducir en los espectáculos dionisíacos de la primavera de 535 a.J.C. el recitado, a cargo del coro de tragodoi o «coro de machos cabríos», que narra las aventuras del héroe. Se le atribuía, además, la invención del prólogo y la creación del actor separado del coro, así como la invención de la máscara. Igualmente se le atribuye la idea de servirse de un carro para ir representando sus obras por los pueblos. No se conserva ningún verso auténtico suyo
(Kyoto, 1836- id., 1924) Pintor japonés. Se dedicó a la pintura tras haberse ocupado de la restauración de varios templos sintoístas. Fiel a la técnica de la tinta, sus sutiles entintados siguen los temas tradicionales de la pintura china de los letrados (flores, pájaros, paisajes), aunque acusan un cierto caricaturismo específicamente japonés y reflejan una moderna libertad de pincelada y colorido