Eclesiástico y administrador español. Canónigo de Burgos, fue nombrado obispo de Yucatán (1644) y gobernador de Nueva España (1648). En 1649 ordenó la celebración del auto de fe de la plaza de El Volador, en el que fueron sentenciados 107 reos. Fue acusado de cohecho y venta de oficios, por lo que a su muerte la Inquisición embargó todos sus bienes
(Salamanca, 1693- id., 1770) Escritor español. A los 15 años ganó una beca de retórica en el Colegio Trilingüe. Después de ordenarse subdiácono, en 1715 marchó a Madrid, donde subsistió ejerciendo los más variados oficios. En 1726 ganó por oposición la cátedra de matemáticas de la Universidad de Salamanca, pero, envuelto en un proceso judicial, tuvo que huir a Portugal y no regresó hasta 1734. En 1745 se ordenó sacerdote. Durante los últimos años de su vida fue administrador del Duque de Alba. Desde 1721 publicó, con el nombre de Gran Piscator Salmantino, sus augurios y predicciones.
Es autor, entre otras obras, de Los desahuciados del mundo y de la gloria (1736-1737), Anatomía de lo visible e invisible en ambas esferas y Un viaje fantástico (1738), Vida natural y católica (1743) -prohibida por la Inquisición-, El ermitaño y Torres (1752).
Escribió asimismo dramas, poesías satíricas, narraciones (Sueños morales, visiones y visitas de Torres con don Francisco de Quevedo en Madrid, 1727-1751; Sacudimiento de mentecatos habidos y por haber, 1726) y, sobre todo, una autobiografía extraordinaria: Vida, ascendencia, nacimiento, crianza y aventuras de don Diego Torres de Villarroel (1743-1751)