Bandolero español, conocido como "El tragabuches". De raza gitana, heredó el apodo de su padre que, en cierta ocasión, se había comido un feto de asna adobado.
Ahijado de Bartolomé Romero, pariente de la familia torera de los Romero de Ronda, fundadores de una de las famosas escuelas de tauromaquia, de joven se formó como banderillero en las cuadrillas de los matadores rondeños José y Gaspar Romero. Recibió de este último la alternativa en la misma corrida, celebrada en Salamanca el 12 de septiembre de 1802, en la que Gaspar Romero fue cogido y muerto en el primer toro, por lo que Ulloa tuvo que terminar la faena.
Su prometedora carrera de torero se vio truncada por un desagradable incidente. Ulloa se dirigía a caballo para torear en otra plaza, cuando un accidente le obligó a regresar de improviso a su casa; aquel desafortunado regreso le llevó a descubrir la infidelidad de su mujer.
Tras dar muerte al amante y la infiel esposa, no halló otra solución para su destruida vida que alistarse en la cuadrilla de bandoleros de Los Siete Niños de Écija, que dirigía en aquella época Juan Palomo. En ella permaneció hasta su definitiva disolución. La mayoría de sus miembros recibieron el indulto, excepto "El tragabuches", cuya huella se perdió desde ese momento
(Lima, 1869 - Barcelona, 1936) Historiador peruano. Investigador especializado en los grandes temas del Descubrimiento de América y en la figura de Cristóbal Colón, desplegó buena parte de su actividad intelectual en Europa y defendió la teoría del origen catalán del descubridor. Educado en una familia de clase media-alta, a los dieciocho años, en 1886, Luis Ulloa inició sus estudios superiores en la Escuela Especial de Ingenieros de Construcciones Civiles y de Minas, terminando dichos estudios en 1889. Pero parece que esta no fue su verdadera vocación, ya que desde muy joven se sintió atraído por el mundo de las letras y por la Historia
Formado en materia histórica de manera autodidacta, por sus méritos docentes consiguió que el gobierno peruano le enviase a Europa en 1896, con el encargo de reunir toda la documentación posible para elaborar un magno proyecto historiográfico: la reconstrucción detallada del Virreinato del Perú. El objeto de dicha investigación, por parte del gobierno peruano, fue poder presentar dicho estudio como prueba sólida en los litigios que dicho país sostenía, por problemas fronterizos, con Bolivia y Ecuador. Pasó varios años investigando en España y envió en el año 1900 unas memorias con los primeros resultados de su trabajo. Una vez terminado el estudio, realizado en colaboración con Manuel Maúrtua, fue presentado como prueba en contra de las reivindicaciones bolivianas en el juicio que tuvo lugar en la República Argentina en el año 1909
Luis Ulloa regresó a su país en 1905, tras lo cual comenzó a colaborar con distintos periódicos de Lima, como el diario La Crónica o el periódico El Liberal, del que fue su director. Además, simultáneamente a su labor como periodista, continuó con sus estudios históricos como miembro de la Sociedad Geográfica de Lima, desde el año 1904. Su labor como intelectual e historiador quedó reconocida tras su ingreso en el Instituto Histórico de Perú y en 1914, cuando fue elegido para ocupar el puesto de director de la Biblioteca Nacional del mencionado país
Ulloa, que había simpatizado con las ideas del Partido Liberal en su vertiente radical, se mostró en todo momento contrario a los gobiernos civilistas, por considerarlos excesivamente autoritarios, sobre todo a partir de 1914, momento en el cual llegó al poder el general Óscar Benavides. Durante los primeros años de la dictadura, camuflada de gobierno democrático, Ulloa desarrolló una intensa labor periodística desde diarios de la oposición como El Tiempo, desde el cual criticó las actuaciones políticas del gobierno.
Fue durante la época en que trabajó como redactor de El Tiempo cuando tomó contacto con grupos de sindicalistas y entró a formar parte del Comité de Propaganda Socialista, tras lo cual Ulloa propuso que aprovechando la estructura existente y los apoyos conseguidos, se constituyeran como partido político. Esta idea no consiguió el apoyo de todos los miembros del Comité, ya que muchos opinaban que primero era necesario que las masas obreras se vincularan a sus ideas. Tras muchas discusiones, finalmente se acordó que el Partido Socialista quedaría constituido el 1 de Mayo de 1919. Muy pronto se demostró que se habían precipitado, ya que, poco tiempo después, la directiva del partido se disolvió
En 1919 Ulloa fue seleccionado para continuar sus estudios en Europa, y se le facilitaron los medios necesarios para investigar en los archivos históricos de Francia y España. Durante estos años pasó largas temporadas investigando en París, en el Archivo Nacional de Simancas, situado en Valladolid; y en el Archivo de Indias de Sevilla. Luis Ulloa recopiló una gran cantidad de documentos relacionados con la época colombina (finales siglo XV y principios del XVI), los cuales pasaron, en forma de fotografías, a su archivo personal. Estos documentos se encuentran en el Archivo Central de Perú, catalogados como Colección Bolivar Ulloa
Algún tiempo después de su llegada a Europa, la Universidad de Barcelona se puso en contacto con él para que impartiera una serie de conferencias sobre Historia de América, entre las que podríamos destacar la impartida el 9 de abril de 1930 titulada La nacionalidad de Colón o la conferencia pronunciada en 1932 bajo el título Problemas del Descubrimiento de América. Hay que destacar que, además de éstas labores como profesor, Ulloa continuó trabajando como periodista en Barcelona. Tras años de investigación sobre la figura de Cristóbal Colón y su tiempo, dio a conocer durante sus conferencias en España y Francia la teoría por la cual afirmaba que el famoso descubridor había nacido en Cataluña.
Esta hipótesis inmediatamente contó con el respaldo de los miembros de la burguesía nacionalista catalana, los cuales se convirtieron en mecenas de sus investigaciones y esperaron impacientes la publicación de las conclusiones. A pesar de que continuó con su actividad investigadora de manera incansable, en 1935 expresó a sus amigos y a su esposa, Blanca Pasquette, su deseo de volver a su país, puesto que se encontraba muy enfermo, pero la situación política peruana no propició su regreso. Luis Ulloa falleció en su domicilio, tras sufrir un infarto, a la edad de sesenta y ocho años, en la mañana del 10 de febrero de 1936. Fue enterrado al día siguiente en el cementerio de Les Corts. A su funeral acudieron representantes de la Generalitat de Cataluña y del Ayuntamiento de Barcelona, además de compañeros de profesión
La obra de Luis Ulloa se vincula casi exclusivamente con las investigaciones que realizó a lo largo de su vida en el campo de la Historia y la Geografía. Especialista en Historia de América, enfocó sus estudios hacia el momento del descubrimiento del continente americano en 1492, centrando la mayoría de sus esfuerzos en los acontecimientos que rodearon la vida de Cristóbal Colón y su relación con la Corona de Aragón. Fruto de esta larga dedicación a la recopilación de documentos y a la investigación histórica fueron sus libros Algo de Historia e Historia del Perú (este último escrito en colaboración con el historiador Carlos Wiesse Portocarrero, padre de la escritora María Wiesse de Sabogal).
Pero sus ideas más originales y polémicas acerca de ese período histórico del Descubrimiento y la Conquista están recogidas en dos interesantes trabajos que redactó en lengua francesa: Cristóbal Colón, catalán (1927) y La verdadera génesis del descubrimiento de América. Dentro de ese interés de Luis Ulloa por subrayar la importancia del papel de la Corona de Aragón en ese episodio crucial de la historia hispanoamericana, hay que ubicar también otro ensayo suyo titulado El descubrimiento hispanocatalán de América. También publicó algunos ensayos relacionados con los problemas fronterizos de su país