Político e historiador mexicano. Hijo de Anastasio Zavala y de María Bárbara Sáenz, estudió en Mérida (Yucatán), en cuyo seminario de San Ildefonso tuvo la suerte de encontrar a Pablo Moreno, maestro de Filosofía y enemigo de la Escolástica.
Lorenzo de Zavala
En 1808, al ser invadida España por Napoleón, Zavala se incorporó a las juntas de San Juan, en la misma ciudad de Mérida, fundadas por el sacerdote Vicente María Velásquez, juntas que habían evolucionado desde un primitivo sentido religioso hasta ser una verdadera sociedad patriótica, con vocación popular, que a partir de 1813 publicó El Aristarco, de la que Zavala era su principal redactor. Éste fundó luego El Redactor y El Filósofo. Vocal de la Junta de censura de Yucatán (elegido el 25 de Julio de 1813), el 4 de mayo de 1814 fue detenido como liberal y encerrado en San Juan de Ulúa.
Liberado en 1817, aprovechó el encierro para estudiar inglés y medicina. En 1820 volvió a Yucatán, donde publicó el periódico El Hispano-Americano. Elegido diputado a Cortes por Yucatán (entre 1820 y 1822), tomó posesión el 25 de febrero de 1821. Al pasar por Cuba, publicó Idea del estado actual de la capital de Yucatán (La Habana, 1821). Parece que en Madrid concibió Zavala la idea de la independencia de América, con formas monárquicas y príncipes españoles. No obstante, ya en el verano de 1821 se fue a París, camino de México; para hacerse pagar el viaje concibió el disparatado proyecto de Moctezuma III.
Pasó de París a Londres, y por los Estados Unidos regresó a México, en donde fue elegido diputado al Congreso. Partidario de Itúrbide al principio, comenzó a distanciarse de él cuando vio que no era viable, y publicó el Proyecto de reforma del Congreso (México; 1822), folleto que obligó al Emperador a sustituir al Congreso por una Junta Instituyente, en la que Zavala representó a Yucatán, lo que no frenó la oposición de éste
Más tarde redactó el discurso preliminar de la Constitución de 1824, y fue elegido senador al año siguiente. Fue uno de los fundadores del rito de York, con Poinsett y Ramos Arizpe, y fue nombrado gobernador del estado de México el 8 de marzo de 1827. Dio a luz el Manifiesto de los principios políticos del Excmo. Sr. D. J. R. Poinsett (México, 1828), y fue considerado, asimismo, el alma del movimiento del 30 de noviembre de 1828, que dio el poder a Guerrero, jefe yorkino, quién le nombró Secretario de Hacienda el 16 de abril de 1829 (se mantuvo en el cargo hasta el 1 de octubre de 1829), y le encargó una delicada misión en Yucatán
Publicó el Manifiesto del gobernador del Estado de México (Tlalpam, 1829), y con el triunfo ulterior de los escoceses, el 25 de mayo de 1830, tuvo que marcharse de México, y se trasladó primero a Estados Unidos y más tarde a Europa. Regresó a Estados Unidos en 1832, pero la cambiante situación política hizo que se le devolviese el gobierno del estado de México, en 1833
Aprovechó la situación para presentar un proyecto de supresión de monasterios y propiedades eclesiásticas, verdadero antecedente de las leyes de Reforma. A finales de 1833 tuvo que trasladarse de nuevo a Europa, momento en el que publicó Viaje a los Estados Unidos de América del Norte (París, 1834). A su vuelta a América, se dirigió a Texas, en donde poseía negocios de concesiones de tierras para los colonos norteamericanos, y a Coahuila, tomando parte en los esfuerzos secesionistas de Texas, cuya declaración de Independencia firmó el 1 de marzo de 1836. Elegido vicepresidente de la República de Texas, se mantuvo en el cargo hasta el 22 de octubre. Era partidario incluso de la anexión de Texas a los Estados Unidos; por ello, los mexicanos le consideran traidor, y los tejanos, por el contrario, le consideran campeón de la libertad.
(Mérida, 1909) Historiador y americanista mexicano. Tras finalizar la carrera de Derecho en su país, se trasladó a Madrid para hacer el doctorado, y luego estuvo durante tres años trabajando en Centro de Estudios Históricos de esta ciudad, hasta 1936, cuando el estallido de la Guerra Civil le obligó a regresar a su país.
Allí trabajó en el Museo Nacional de Historia de Chapultepec, al frente del cual se puso años más tarde y fundó la revista Historia de América, cuya dirección asumió hasta 1965. Durante esta época formó parte de la Junta de Gobierno
Miembro del Colegio de México desde 1940, su magisterio se llevó a cabo en la Universidad Autónoma de México y en otras universidades de Latinoamérica -Puerto Rico, (1945), La Habana (1946) y México City College-, y de los Estados Unidos -Harvard (1953), Washington y Ghent (1956)-. Desde esta época ocupó cargos relevantes en organizaciones internacionales como la UNESCO y la ONU, en la que estuvo a cargo de la sección de cultura y educación. Entre 1966 y 1975 fue embajador de su país en Francia
En 1992 viajó a España, con motivo de haberse presentado su candidatura al Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales, que respaldaban los departamentos de Historia de las Universidades de Sevilla y Navarra, y que no le fue concedido, pero aprovechó su estancia en la capital española para tomar parte, como representante del Colegio de México, en el Congreso Internacional de Universidades, en el que estuvieron presentes numerosas instituciones académicas de Europa y Latinoamérica.
Al año siguiente se propuso nuevamente su candidatura al Príncipe de Asturias, que le fue concedido el 14 de abril de ese año. Ese mismo año se le concedió la la Medalla "Belisario Domínguez", máxima galardón que concede México a un hijo ilustre del país, y en 1996 fue investido doctor Honoris causa por la Universidad Autónoma de México (UNAM)
Su dedicación a la docencia no le impidió también incursionar en la literatura, a la que dio obras notables como Iberoamérica: una comunidad, que prologó Arturo Uslar Pietri en 1990, y por la que fue candidato al Premio Cervantes. Otras obras suyas publicadas son Por la senda hispana de la libertad (1991), La conquista de Canarias y América (1991), Entradas, congregas y encomiendas en el nuevo Reino de León (1992) y Suplemento documental y bibliográfico a la encomienda indiana (1994), que constituyen valiosos estudios de la historia americana durante la etapa colonial
Es también miembro de numerosas instituciones, como la Academia Nacional de Historia y Geografía, la Academia Mexicana de Historia, la Academia Mexicana de la Lengua y correspondiente de numerosas Academias de la Historia; asimismo, pertenece a la Asociación Inglesa de Historia desde 1956 y el año siguiente ingresó en la Real Sociedad de Historia de Londres. Además de los antes citados, entre los galardones recibidos durante su trayectoria profesional se cuentan el Premio Nacional de México de Literatura (1969), el Premio de Historia de la Academia del Mundo Latino de París (1974), el Premio Arch. C. Gerlach del Instituto Panamericano de Geografía e Historia (1986). En 1988 se creó en México el premio de Historia Colonial de América que lleva su nombre, concedido con carácter anual por el Instituto Panamericano de Geografía e Historia.